Los notarios públicos siguen falsificando, estafando y despojando en Coahuila

Jamás en Parras de la Fuente los bienes raíces habían elevado tanto su valor. El alto lucro de la plusvalía desencadenó las ambiciones del cártel inmobiliario de Coahuila, una mafia conformada por notarios públicos, jueces, ministerios públicos, corredores y burócratas de registros y catastros. Un cártel dispuesto a falsificar, estafar, despojar y hasta matar.

Porque esa es la delincuencia organizada que actualmente está operando en nuestro estado y que fue heredada por funcionarios cómplices y una laxa Ley del Notariado.

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Y así como en otros estados los delincuentes violentos e irracionales cometen ejecuciones, en Coahuila el cártel inmobiliario también ejecuta a sus víctimas en su patrimonio y sus propiedades, despojo que aquí no se considera delito grave y menos contra los notarios públicos que siguen atracando con toda impunidad.

Es cierto que no todos los fedatarios de Coahuila son corruptos, son pocos los delincuentes organizados en cárteles, pero sus raterías manchan cada distrito notarial porque seguido hay manifestaciones de hechos delictivos.

En el pueblo mágico de Parras fue donde esta semana algunos manifestantes que se dicen defraudados acusaron públicamente al notario Jesús María Farías Sierra de falsificación y el despojo de un cinema y un rancho, cuyo valor supera los 30 millones de pesos, y que este notario, según acusan los afectados, les pretende robar como herederos que son del señor Isaac Gallardo Gómez, fallecido hace algunos meses en la ciudad de Monterrey.

Vea usted en Facebook la publicidad de la Notaría número 3 de Parras de la Fuente a cargo del fedatario Jesús Farías Sierra. El hoy acusado de despojo le pregunta a usted, animándolo a que sea su cliente: “¿Te has preguntado qué sucede con la herencia de un ser querido después de su partida?”. Habrá que preguntarles a los herederos de Isaac Gallardo Gómez qué opinan de esa publicidad.

Lo cierto es que algunos fedatarios en Coahuila falsifican, estafan y despojan con toda impunidad. El señor Enrique Gallardo asegura que sicarios armados lo han buscado en el rancho del cual lo pretenden despojar. ¿El cártel dispuesto a matar?

Durante muchos años los personajes más desprestigiados de este país han sido los políticos, los diputados, los abogados, los policías, los burócratas, y aquí en Coahuila no tarda mucho en que a esa lista del repudio se agregue al notario público. El notariogangster.

Hemos dicho que tanto abuso de los fedatarios ha sido permitido por las leyes laxas que incentivan la violación de la ley y la impunidad. Urge entonces una reforma al Notariado de Coahuila. Aunque pedirlo sea como arar en el mar.

Luz Elena Morales Núñez es la primera mujer que preside el Poder Legislativo de Coahuila. Es diputada, es abogada, es política y es notaria pública. Pero el pueblo la quiere, de eso no hay duda. Y brillará más su trayectoria si emprende una reforma a la Ley del Notariado de Coahuila.

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En un parlamento abierto este neófito propondría reducir la cantidad de notarios. No permitir ser notario y ejercer un cargo público. Aprobar un examen Summa Cum Laude a modo de superfiltro. Acotar la discrecionalidad de los gobernadores para otorgar notarías. Y que el síndrome “Diablito-Saúl” quede plasmado en la ley como potente antivirus.

¿Acaso ahora que el Colegio de Notarios lo preside una mujer dejará de ser una cueva de ladrones? ¿El notario Jesús Farías es el delegado del Colegio en Parras? Como exclama mi amigo Orestes: “¡Haya cosa!”.