No es fácil ser viejo

Opinión
/ 15 septiembre 2022
true

En los últimos años, la psicología y terapeutas han puesto su trabajo y esfuerzo en atender niños, adolescentes y jóvenes con problemas en su salud mental. Es cierto que a partir de la pandemia se acentuaron sus problemas como estrés, ansiedad, depresión, pensamientos suicidas y soledad, sin embargo, nos hemos olvidado de la atención emocional para las personas de la tercera edad. ¿Por qué la mayoría de las personas mayores con problemas de salud mental sufren en silencio y no buscan el tratamiento que necesitan?

La revista International Psychogeriatrics publicó un estudio que afirma que una de las creencias sostenidas en personas de 60 a 79 años es sentirse deprimidos y ansiosos durante sus años dorados. La verdad es que los problemas de salud mental no son normales durante el envejecimiento. Según los Centros para el Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), en Estados Unidos una de cada cinco personas mayores de 55 años tiene un tipo de problema relacionado a su salud mental como ansiedad, problemas en su cognición, estrés, soledad y depresión. Y lo más triste, las personas mayores de 85 años tienen la tasa más alta (cuatro veces más) de suicidios en Estados Unidos.

¿Cuáles son los retos más comunes que enfrentan las personas durante el envejecimiento? Pérdidas acumuladas como la muerte de su pareja, familia o amigos cercanos. Enfermedades físicas graves que afecta su movilidad, actividades, independencia y sentido de uno mismo. Aislamiento social y sentimiento de soledad. A nivel mundial casi la mitad de los adultos mayores expresan sentimientos de abandono por parte de su familia y amistades. Estrés financiero al no percibir un ingreso fijo, disminución de sus recursos económicos y falta de apoyo económico de sus descendientes. Jubilación obligada y dificultad para encontrar actividades para su desarrollo profesional y laboral. Sentirse excluidos por la belleza y energía de los más jóvenes. Pérdida de sentido significativo de vida.

No hay duda de que el envejecimiento sufre desafíos que aumentan en las personas el riesgo emocional y las hace más vulnerables a afecciones como ansiedad, alcoholismo, estrés y pérdida del sentido de la vida.

Necesitamos tomar conciencia de los problemas que están viviendo nuestros hermanos mayores. Es nuestra responsabilidad ayudarlos a tener una vida feliz y con plenitud. Desafortunadamente, la mayoría de las personas mayores luchan con serios problemas perjudiciales y nunca son diagnosticados y, por lo tanto, nunca reciben el tratamiento que necesitan para tener una vida más satisfactoria. Un estudio publicado en Psychiatric Services encontró que aproximadamente el 70 por ciento de las personas mayores que tenían ansiedad y trastornos del estado de ánimo nunca buscaron ayuda para sus problemas de salud mental. También hay muchas personas mayores que no creen que puedan cambiar a su edad y menos hablando con un profesional sobre sus problemas.

La edad no es una barrera para el tratamiento de la salud mental. Buscar ayuda en cualquier momento de la vida no es una indicación de debilidad o fracaso; es una señal de coraje. Los problemas de salud mental son en realidad problemas cerebrales, no defectos de carácter o deficiencias personales, y una vez que se identifican correctamente, se pueden emprender estrategias para ayudar a que el cerebro alcance un mayor equilibrio, sin importar la edad que tenga.

Temas



Es licenciado en Educación con Maestría en Desarrollo Organizacional por la UdeM. Maestría en Psicopedagogía Clínica en España. Cuenta con doctorado en Currículum e Instrucción por la Universidad del Norte de Texas y estudios de Postrgrado en Educación, género, aprendizaje y cerebro en el programa de Velma Smichdt por la Universidad del Norte de Texas.

COMENTARIOS

NUESTRO CONTENIDO PREMIUM