Camposantos (Fotogalería)
Para algunas culturas, la relación de los mexicanos con sus muertos es difícil de comprender; los monumentos funerarios llaman particularmente la atención
/
27 octubre 2019
COMPARTIR
Por: OMAR SAUCEDO Y FELIPE RODRÍGUEZ
“La última morada” se llama a las tumbas donde los vivos y los muertos se separan, temporalmente, tras un deceso.
Los panteones son entonces sitio de encuentro, mientras los que se quedan de “este lado” alcanzan a los suyos en el Más Allá, en el Paraíso, el Mictlán o en donde quiera que las almas tengan su destino.
Los cementerios son el último lugar donde se honra a quienes fallecieron, por eso los espacios donde se depositan los resto mortales de “los que se adelantaron en el camino” llegan a ser verdaderos monumentos funerarios, hechos con materiales como el mármol bello y duradero, en el que manos de artistas moldean figuras celestiales que cuidan a quien desde esos camposantos esperan la eternidad.
COMENTARIOS