¿López Obrador logrará medir la fuerza de Joe Biden?

Ojalá que los vientos de sanidad que se propone Joe Biden, virtual presidente electo de los Estados Unidos de Norteamérica bajen, disipen y renueven los aires que nos ha provocado nuestro Presidente en nuestro país, que se resiste a aprobar el triunfo electoral de la elección norteamericana, muy distinto a lo que hicieron algunos jefes de estado del mundo.

Esa negativa es una muestra muy clara de que su simpatía estaba aproximada a Trump que  empataban en ideologías y actitudes absolutistas, por lo que esperemos que el actuar del nuevo Presidente no nos perjudique en el sentido de que pudiera frenar el avance de nuestra nación mediante la implementación de medidas restrictivas a nuestras exportaciones después del 20 de enero de 2021.

Por fortuna, Biden es de los moderados que se inclinan más por resolver las dificultades por la vía de la no confrontación, es decir, en forma cerebral que esperemos que nuestro Presidente lo sepa procesar, como el programa de los inmigrantes que ha dado muestras de que no comulga como lo que implementó Trump. Otro renglón que puede cobrar controversias es el del pago por hora, que según el nuevo T-MEC con ese país y con Canadá, lo quiere ver de reojo.

Por lo que se ve el nuevo Presidente estadounidense refleja un humanismo muy lejos del de Trump con sus torpes arrebatos en perjuicio de estratos sociales e imponiendo una actitud racista intolerante como supremacista blanco que es.

Algo similar estamos viviendo en México, pues nuestro Presidente está llevando una vida política basada en una venganza parida por un rencor que no le cabe en el pecho y que cada día lo expulsa en forma insultante, sobre todo con los adinerados, que según dice no los necesita, por lo que no acepta que el poder del dinero esté sobre él y que pregona que ya logró separarlo del poder político, lo que los empresarios han dejado correr esa versión hasta estos tiempos, y que ahora después de algunos meses ha ido cediendo que los está acercando lentamente, reconocimiento tácito de su aceptación.

Esos tiempos esperanzadores del país del norte ojalá empiecen a soplar en nuestro país y modere la actitud absolutista de López Obrador, quien en forma estruendosa nos ha llevado imponiendo su estilo frívolo de gobernar en lugar de convencer por caminos seguros de progreso y no de, en muchos casos, caprichos para demostrar un poder rebasado.

Esa forma aturdida de proceder ha dado lugar a la creación de una colectividad formada, por lo pronto, por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), el Partido Acción Nacional (PAN), el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y por múltiples asociaciones, además de miembros de la iniciativa privada como Claudio X González y Gustavo de Hoyos, presidente de la Coparmex, que han mostrado unirse en el organismo denominado “Sí por México” con el objeto de luchar por nuestro país cuyo avance no se nota, por lo que de prosperar será un dardo envenenado dirigido a Morena para desbancarla y llevarla a su extinción, lo que sería con seguridad la salvación que frene las desviaciones en los caminos de bienestar. 

La demostración de un criterio errático alejado de una cortesía protocolaria de política internacional por parte de López Obrador en el sentido de abstenerse a saludar el triunfo de Biden, podría incidir en menoscabo comercial a pesar del tratado recién firmado, y ladear la balanza comercial en forma deficitaria con nuestro país. 

No es posible que una persona que ha llevado a nuestra nación por caminos torcidos, sólo por razones vengativas, ponga en peligro asuntos que traspasan nuestras fronteras y con mayor incidencia con el hombre más poderoso del mundo, cuya dimensión no alcanza a comprender.

No cabe duda que tiene una vista muy corta ya que su ofuscación no lo deja ver una realidad que no deseaba, pues no se le pide que se incline como lo hacía ante Trump que cada vez que pronunciaban su nombre realiza una genuflexión, sólo se le pide saberse manejar en el ámbito de las naciones, pero es claro que no le entiende.

Se lo digo EN SERIO.

franciscoaguirreperales@gmail.com

@aguirreperalesf