Se deteriora la salud de los mexicanos
La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2022 muestra un significativo deterioro en los niveles de salud de los mexicanos, con incrementos en varias importantes enfermedades, así como un aumento en el gasto de bolsillo de la población para atender sus necesidades de salud
Los resultados revelados por la recientemente publicada Encuesta Nacional de Salud y Nutrición son desalentadores. Entre 2018 y 2022, se registraron incrementos en la prevalencia por diagnóstico previo de diabetes, hipercolesterolemia, enfermedades cardiovasculares y daño renal. Asimismo, se incrementó el porcentaje de la población que se atiende en servicios privados, incluyendo los consultorios adyacentes a farmacias, lo que representa un posible conflicto de interés en la atención médica proporcionada en estas unidades.
La prevalencia de diabetes en el país en 2022 ascendió a 18.3 por ciento de la población. Para poner este dato en perspectiva, cabe señalar que lamentablemente somos el país con mayor incidencia de esta enfermedad en América Latina y el lugar 21 a nivel mundial. Solamente el 12.2 por ciento de los adultos acudieron el año previo al levantamiento de la Ensanut 2022 a realizarse pruebas de detección de diabetes, cifra muy inferior a la correspondiente a la Ensanut 2012 (1). La tasa de mortalidad por diabetes en el país se ha incrementado, al pasar de 71.6 por 100,000 habitantes en 2012 a 84.1 por 100,000 habitantes en 2017 (1).
En cuanto a la hipertensión arterial, de acuerdo con los resultados de la Ensanut 2022, casi la mitad (48 %) de los adultos en México la padece. De ellos, el 66 por ciento desconoce que tiene la enfermedad. Entre los principales factores de riesgo asociados a la hipertensión se encuentran la edad, padecer diabetes, el sobrepeso y una menor escolaridad. Así, mientras que el 63 por ciento de los adultos con escolaridad menor a primaria padece hipertensión, el 40 por ciento de quienes tienen escolaridad mayor a secundaria tiene hipertensión. Cabe destacar que menos del 33 por ciento de los pacientes bajo tratamiento médico por hipertensión arterial logra tener su presión controlada. Por género, la prevalencia de tensión arterial controlada fue de 28 por ciento en hombres y de 38 por ciento en mujeres, cifras que se comparan negativamente con las prevalecientes en Estados Unidos (51% en mujeres y 44.8% en hombres) y en Canadá (56.9% en mujeres y 64.0% en hombres) (2).
La obesidad (importante factor de riesgo para diabetes e hipertensión) aumentó significativamente entre 1999 y 2021. La obesidad en niños de 5 a 11 años aumentó de 9 a 18.6 %, en adolescentes de 12 a 19 años aumentó de 12 a 18 %, en mujeres de 20 años o más se incrementó de 26 a 39 %, mientras que en hombres de 20 años o más aumentó de 19.4 a 31. 8%. (3).
De acuerdo con la Encuesta, casi la mitad (49 %) de los mexicanos no tiene acceso a seguridad social. Solo el 60 por ciento de las personas afiliadas al IMSS se atiende en esa institución, aun siendo derechohabientes. Treinta y cinco por ciento se atiende en unidades del sector privado y el cinco por ciento lo hace en unidades de la Secretaría de Salud. Prácticamente, la mitad (49 %) de la población atiende sus necesidades de salud en unidades médicas privadas, con el consecuentemente elevado gasto de bolsillo para la población. Dieciocho por ciento de la población se atiende en consultorios adyacentes a farmacias, lo que implica cierto riesgo de conflicto de interés en la atención médica a estos pacientes.
Entre las razones que los encuestados señalaron para no atenderse en las unidades médicas del sector público destacan las relacionadas con la facilidad de acceso (71 por ciento) y la calidad del servicio proporcionado (21 por ciento). Los factores más importantes mencionados por los encuestados son el plazo para las citas médicas, la distancia al centro médico, el tiempo de espera para pasar a consulta y la calidad de la atención recibida, entre otros.
Como se puede ver en las líneas anteriores, los resultados mostrados por la Ensanut 2022 son desalentadores, con crecimiento en algunas de las principales enfermedades que aquejan a los mexicanos y además con un mayor gasto de bolsillo para atender sus necesidades de salud. Dada la importancia de la salud para el bienestar y el desarrollo, es indispensable que el Gobierno incremente sustancialmente su inversión en este importante rubro, a fin de que se logren mejoras significativas en la salud de la población. De no hacerlo así, se retrasará fuertemente el desarrollo del país.
(1) Escamilla-Núñez, M. C., Castro-Porras, L., Romero-Martínez, M., Zárate-Rojas, E., & Rojas-Martínez, R. (2023). Detección, diagnóstico previo y tratamiento de enfermedades crónicas no transmisibles en adultos mexicanos.
(2) Ensanut 2022. salud pública de méxico, 1-10.Campos-Nonato, I., Oviedo-Solís, C., Vargas-Meza, J., Ramírez-Villalobos, D., Medina-García, C., Gómez-Álvarez, E., ... & Barquera, S. (2023). Prevalencia, tratamiento y control de la hipertensión arterial en adultos mexicanos: resultados de la Ensanut 2022.
(3) Salud Pública de México, 65, 1-12.Aburto, Z. R. (2023). La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2022. Salud Pública de México, 65, s1-s4.
