Se puede decir... Que tiene casas y “casotas”

Pero no se puede decir... Que es lo que está a la “vista”. Sin excepción, todos los políticos que logran formar parte de ella, se sacaron la lotería, -sin jugar-, pues como dijera alguien, si no se está dentro de ella, es vivir en el error, y eso no es nuevo, ya que al final de cada Sexenio, salen varias camadas de millonarios, cuyos millones alcanzan hasta para tres o cuatro y más generaciones, a eso se debe que todos ambicionan en ser políticos, y uno de los casos más recientes es el de Alito, que tiene una casita de trescientos millones, sin contar el efectivo que ha de “tener”en el extranjero.