¿Se rompe la burbuja del poder presidencial? Le fallan al presidente sus sensores y asesores políticos
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Panamá.- Les platico como se decía antaño al dar las noticias: “Interrumpimos este programa...” para dar mi opinión sobre el traspié de la magistrada Yasmín Esquivel en su intento -y el de López Obrador- por ocupar la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Es que hoy tocaba el 2o episodio de mi serie “La falacia de mover la portería”.
Hoy les platicaré del caso de Yasmín y mañana le sigo con el de las remesas y la fuga de mexicanos aspiracionistas hacia Estados Unidos. Arre!
PUDO HABER SIDO CERO, PERO ELLA VOTÓ POR SÍ MISMA
A la 2a ronda de la votación de los magistrados por la presidencia de la SCJN, pasaron Norma Piña y Alfredo Gutiérrez.
Ganó Norma 6 a 5 y tirada patéticamente en la primera ronda quedó la favorita de Andrés Manuel con un solo voto, el de ella.
Hasta en eso le faltó humildad y dignidad a la esposa de otro favorito del presidente, en este caso en la rama de la construcción, José María Riobóo, a la sazón ambos marido y mujer desde hace siete años.
Por más que hoy se diga lo contrario, Yasmín era la candidata del presidente.
Si aún lo dudan, lean esto que AMLO declaró cuando se desató el escándalo del plagio de la tesis de la “pasante de Leyes” que quiso ser la mera mera de la SCJN:
Refiriéndose a Yasmín, el presidente dijo:
“Ha actuado con rectitud y ha apoyado nuestras incursiones al poder judicial cuando todos estaban en contra”.
Y Claro que ese fue el rol de Yasmín, quien de 18 asuntos relativos a la 4T -tratados por la SCJN entre 2019 y 2022- ella votó a favor en 12, el 67%.
Norma Piña votó a favor en 3, para el 17%, por eso ganó.
Alfredo Gutiérrez votó 4 veces a favor de los asuntos de la 4T, para un 22%, por eso quedó en 2o lugar.
Está clara la raya que le pintó la SCJN a López Obrador y esto no debe tenerlo muy contento.
SÍ TRATÓ DE CONTROLAR A LA SCJN
Que nadie se haga..., fue claro el intento de Andrés Manuel por controlar al máximo órgano del poder judicial.
Para comprobarlo, lean esto:
LORETTA ORTIZ
Sus otras dos propuestas para presidir a la SCJN fueron Loretta Ortiz y Celia Maya, ambas cuestionadas por la oposición por su cercanía con el mandatario y con Morena.
José Agustín Roberto Ortiz Pinchetti, esposo de Loretta Ortiz, la Representante del Comité Coordinador del Sistema Nacional Anticorrupción, es Fiscal Especializado en Delitos Electorales y asesor personal del presidente.
CELIA MAYA
La frustrada candidata a la gubernatura de Querétaro, goza de las mayores confianzas de López Obrador.
Por eso la nombró en el 2018, coordinadora de la defensa de la 4T en esa entidad, dejando fuera de la competencia a los 12 candidatos restantes.
Paradójicamente, su cercanía política y personal de más de 20 años con el Presidente, truncó su carrera en el Poder Judicial.
En el mismo 2018, López Obrador la propuso como ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Celia fue rechazada en el Senado por esa evidente cercanía con el mandatario, pues ponía en duda su actuación imparcial en sus decisiones y votaciones en la Corte.
LE FALLARON SUS “SENSORES POLÍTICOS”
Sabiendo esto último, ¿por qué la propuso en su terna para la SCJN?
Es evidente que el presidente adolece de sensores y asesores en esta materia y en varias más.
Otro yerro de AMLO fue no haber investigado los antecedentes de Yasmín.
Si tanto presume el gobierno de sus “sensores políticos” -que me desmienta Layda Sansores, gobernadora morenista de Campeche- ¿Cómo se les pudo escapar que Yasmín le plagió su tesis al abogado Edgar Ulises Báez?
La respuesta es la misma aplicada a otros temas:
DE OCURRENCIAS Y ROMPECABEZAS...
López Obrador gobierna a México con base en ocurrencias.
López Obrador desbarató en cuatro años, un rompecabezas que México ha intentado armar en casi un siglo.
López Obrador no tiene gente inteligente que le ayude.
López Obrador es seguido y apoyado -todavía- por quienes parecen estar alucinados, anestesiados, esperando un milagro, que si no se dio en cuatro años, menos se va a dar en los dos que le faltan a su sexenio.
López Obrador no tiene en su puño -como él quería- al poder judicial y va a perder su hegemonía en el legislativo antes de las cruciales elecciones del 2024.
Y respecto al poder ejecutivo que él representa, este año se va a dar cuenta -y le va a doler- que a su alrededor tiene a puros pusilánimes que no se atreven a llevarle la contra.
Y ese será el ocaso de una 4T que nació, no para un proyecto de gobierno de 6 años, sino de mínimo 12, y que está iniciando el 5o con los peores augurios...
CAJÓN DEL SASTRE PANAMEÑO
“Oftalmólogo a sus ojos; venerables amas de casa a sus cacerolas y emBOLAdos a sus bolas. O cómo era el refrán? Ah, sí: ‘zapatero a tus zapatos’, y esto lo digo por aquellos desadaptados que se creen periodistas y opinan a lo bruto en redes y chats”, remata la irreverente de mi Gaby.