¿Una siesta? Descubre los beneficios de los descansos cortos

Thomas Edison, conocido por ser uno de los inventores más prolíficos de la historia con un total de mil 093 patentes registradas en su nombre en los Estados Unidos, era conocido por no ser partidario del descanso. En una entrevista de 1889 en la revista Scientific American, el inventor de la bombilla dijo que nunca dormía más de cuatro horas cada noche, ya que pensaba que dormir era una pérdida de tiempo.

Edison solía sostener una bola de metal en una mano mientras se sentaba en una silla y se preparaba para dormir. Ponía un plato de metal debajo de su mano. La idea era que, al comenzar a dormirse, etapa hipnagógica, su mano se relajara y soltara la bola, la cual caería al plato y lo despertaría con su ruido. Esto lo mantenía en un estado donde estaba casi dormido, pero aún despierto, lo que hacía que su cerebro fuera más creativo y pudiera hacer conexiones sorprendentes.

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Un informe publicado en 2021 en la revista Science Advances dice que cuando estamos a punto de quedarnos dormidos, en una etapa llamada N1 o Etapa 1 del sueño, sin movimientos rápidos de los ojos (no-REM), experimentamos un breve momento de creatividad y comprensión. Los descubrimientos sugieren que si podemos usar ese momento entre el sueño y la vigilia podríamos recordar nuestras ideas geniales de manera más sencilla.

Descansando en su laboratorio en Nueva Jersey, Edison se tomaba pequeños descansos mientras trabajaba. Un estudio publicado en 2018 descubrió que tomarse un breve descanso tranquilo, llamado “quiescencia despierta”, incrementaba las probabilidades de encontrar mejores ideas para la solución de problemas o creatividad.

El famoso pintor Salvador Dalí también probó un truco parecido al de Edison: colocaba una llave sobre una bandeja metálica mientras dormía, la cual hacía ruido al caer y lo despertaba. Se dice que esto lo inspiró para crear su arte imaginativo.

Durante la etapa hipnagógica, el cerebro tiene un estado mental parecido al de estar soñando, donde:

1) Se analizan pensamientos y cosas que han sucedido recientemente.

2) Se establecen nuevas relaciones entre ideas.

3) La mente es más receptiva a ideas creativas y pensamientos espontáneos.

Este estado es muy útil para solucionar problemas o encontrar ideas nuevas, algo que Edison buscaba mucho en su trabajo como inventor. Aunque Edison no hablaba abiertamente sobre la importancia de dormir siestas largas y solía decir que dormía poco, hay pruebas de que tomaba cortos descansos para descansar su mente y seguir siendo creativo. Esto indica que comprendía la importancia del descanso para la creatividad, aunque tal vez de manera instintiva.

Se dice que el cerebro se “apaga” durante el sueño, pero en realidad es un proceso muy activo desde el punto de vista neurológico: las células del cerebro se activan en gran cantidad, nos ayudan a recordar y guardar recuerdos, y también parecen ser responsables de nuestras ideas creativas.

Se recomienda una siesta durante el día, lo mejor es no superar los 20-30 minutos y antes de las 15:00 horas para evitar interferir con el sueño nocturno.

Sus beneficios son:

1) Mejoran la concentración, el estado de alerta y el rendimiento.

2) Ofrecen beneficios cognitivos.

3) Ayudan a consolidar la memoria y a mejorar habilidades de aprendizaje.