‘Ana y Bruno’ la película animada más cara en la historia de México tiene una misión: la taquilla
COMPARTIR
La nueva producción animada hecha en México tiene el objetivo de convertir los elogios que hasta ahora ha recibido en ingresos
Algo es seguro para la película Ana y Bruno, ya es considerada como la animación más cara del País, ahora con su estrenó en la salas mexicanas este viernes, tiene por delante desquitar la inversión. Podría ser una misión difícil, pero las críticas recibidas hasta ahora podrían resultarle favorables.
Con 104 millones de pesos a cuestas la animación dirigida por Carlos Carrera ha sido cobijada por la crítica como un fuerte aspirante a conquistar al público mexicano y extranjero debido a su historia que tardo 13 años en ser llevada la Pantalla Grande.
De momento, el filme ya ha recibido reconocimientos como el de Mejor Película de Animación en los Premios Quirino, celebrados en España, que reconocen el talento iberoamericano del género. Por otra parte, voces especializadas como la de Guillermo del Toro se refirió a ella como “muy divertida y llena de atmósfera”.
La historia se centra en Ana, una pequeña niña que llega junto a su madre a una “casa de descanso”. Ahí conocerá a Bruno, un extraño ser verde, que junto a otras criaturas buscará salvar a la mamá de la protagonista de un flamígero monstruo.
De momento, la película distribuida por Corazón Films ha sido alabada por la calidad de su animación y por tener un reparto que da voz a los personajes entre los que se incluye a Demián Alcázar, Regina Orozco, Héctor Bonilla y Silverio Palacios.
Sin embargo, no solo de buenas recomendaciones vive la película y a menos de 24 horas de su estreno ahora tiene la misión de capitalizar la inversión.
Para ello, la cinta será estrenada en más de mil salas de cine del País, y ya tiene pactado el estreno en otras naciones, como España, Ecuador, Perú, Chile, Bolivia y Argentina, desde este mes hasta enero del año próximo. Así mismo está por definir fechas para salas en China, Rusia y Medio Oriente.
“Es muy extraño que una película mexicana, antes de ser estrenada en su propio país, ya tenga fechas de estreno en otros países”, destaca Isabel Aerenlund, productora ejecutiva de la cinta, quien califica de antemano esto como un logro.