La Colección Museo Dom sale de casa
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El coleccionista Rodolfo Domínguez presenta esta exposición con las piezas adquiridas a lo largo de casi veinte años
La práctica del coleccionismo es incipiente en Saltillo; pocos son los activos compradores de obras de arte y muchos menos los que de manera profesional se han encargado de crear un patrimonio con una línea curatorial definida.
Rodolfo Domínguez es ejemplo de este último caso, pues desde el 2000 ha invertido en arte, principalmente de creadores coahuilenses, creando una colección de más de 30 piezas, la mayoría de ellas únicas, pedidos originales, y nunca antes vistas que ahora están expuestas en los muros de Residencias Corona.
La exposición Colección Museo Dom fue inaugurada el pasado jueves y en entrevista con VANGUARDIA el dueño comentó que cuando inició con este proyecto lo hizo con la intención de apoyar al arte local.
“Muchas de las piezas que estás viendo aquí nunca han sido expuestas en ninguna parte, son pedidos especiales. Todos son grandes amigos y entonces empecé a comprarles un poquito de obra”, expresó.
La colección cuenta con piezas de Carlos Villela, Laura Gutiérrez, Omar Campos, Jerónimo Valdés, Omar Leza, Roy Carrum, Vini, Daniel Alcalá, Mónica Álvarez, Armando Meza, Ariel Leviel, Patricia Maltos, Roxana Juárez, Geroca, Carlos Vielma, Daniela Elidett, Lilette Jamieson, la niña Regis Gómez y el francés Antrios.
El nombre Museo Dom se debe a que las piezas siempre han estado en su casa y, de hecho, esta es la primera vez que salen, pero reconoce la necesidad de darles más visibilidad y señaló que planea en un futuro hacer una galería para ellas, de mera exhibición, sin afán de venderlas.
Nos contó que “aquí en Saltillo hay grandes coleccionistas, uno de ellos es Roberto Ortiz, quien me ha ido orientando en qué ir comprando. Yo como que me enfoqué mucho en un grupo de amigos, que como que todos eran de una misma generación y corriente”.
Expresó que le gustaría tener una obra de Carlos Farías y que “hemos estado en negociaciones, todavía no llegamos como a un arreglo porque me estaba vendiendo obra que ya tenía hecha y quiero algo original”.
Recomienda para los interesados en comenzar sus propias colecciones o en adquirir obra de algún artista específico hacerlo la compra directamente con el autor, sin galerías u otro tipo de intermediario, pues los precios se elevan mucho con ellos de por medio, aunque sí insta al público a perderle el miedo a adquirir piezas de arte.
En su colección en particular hay piezas desde los 500 pesos hasta más de 30 mil pesos, por lo cual también se demuestra cómo existe un mercado para todo tipo de bolsillo.
