Siete mujeres, un personaje, contra la ‘Tormenta’ en el Teatro García Carrillo
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El monólogo escrito y dirigido por Lucía Sánchez Robles, pero interpretado por 7 actrices, sobre una mujer que se enfrenta a una tormenta solo con un paraguas, tendrá una breve temporada en el Teatro García Carrillo
En medio de la tempestad, con nadie a su alrededor, una mujer decide hacerle frente, solo con el apoyo de un paraguas. “Tormenta” es una historia de resiliencia a siete voces, que entre la sororidad y
La obra, escrita y dirigida por Lucía Sánchez Robles, tendrá una breve temporada este mes en el Centro Cultural Teatro García Carrillo, con una propuesta que muestra la diversidad de lecturas y mensajes que puede haber en una experiencia.
En entrevista con VANGUARDIA, el elenco, conformado por las actrices Pamela Torres, Fabiola Vargas, Ruby Martínez, Ana Luisa Aguilar, Faby Rojas y Anel Flores, así como la propia autora, explicaron que a pesar de ser un texto escrito como monólogo, el montaje se realizó con la intención de darle diferentes voces a un mismo personaje desde la empatía y la honestidad.
“Al momento de abordar un texto de una manera tan evidente, sin tapujos, creo que se ha logrado una transacción más empática con el ejecutante y con el espectador”, explicó al respecto del trabajo en el Taller de Dramaturgia “Teatro Testigo de la Vida” de Medardo Treviño, del cual surgió la obra.
“Ningún tema es trivial, nosotros trivializamos los temas, le restamos importancia a nuestros sentimientos, preocupaciones sociales, y todo es importante. En el momento en que le damos peso a nuestras expectativa y no expectativas la honestidad fluye”, agregó, “son experiencias de vida generales, está protagonizado por una mujer, pero cualquier ser humano que haya enfrentando diferentes tormentas, diferentes circunstancias que haya tenido que resolver de manera voluntaria o involuntaria ha logrado compenetrarse con el texto”.
El personaje, explicó, se “desdobla” y cada una de las propuestas de las actrices, al llegar a escena, es tan real como la anterior, no solo porque parten de la misma fuente, si no porque se originan en el mismo espacio y desde una emoción similar.
“Amanecimos en la mañana con un feminicidio, me cimbró. Tenemos que reunir nuestras voces. Tenemos que reforzar este tema de diálogo entre nosotras como género y sobre todo que nos respaldemos, que no nos riamos de nosotras, de nuestras emociones, ni nos minimicemos”, señaló la directora.
La diversidad de lecturas entre el elenco es visible, comentaron, a través del tratamiento que cada versión del personaje le da al paraguas, desde quien lo ve como un instrumento de protección hasta aquella que lo destruye por completo.
“Ha sido muy catártico porque el texto es fuerte. Te hace cuestionarte absolutamente todo y para mí es bien valioso que sea una dramaturgia de ella, porque las nuevas dramaturgias son necesarias”, comentó Pamela Torres, “a veces recurrimos a textos clásicos y nos ayudan a nuestra formación, pero siempre uno tiene que volver a uno mismo para replantear cosas y salir al caos y creo que el texto es un pretexto magnífico para que por lo menos nosotras nos cuestionemos qué estamos haciendo”.
Para Fabiola Vargas ser parte de esta obra también es una oportunidad de volver al escenario, y de hacerlo con la compañía de “mujeres poderosas que contribuyen a que todo se logre de esta manera tan bonita”.
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Ruby Martínez ahondó en el uso que le dieron al paraguas; en su caso, partiendo desde sus vivencias, sintió que este debía ser destruido, pues en el episodio que le toca interpretar la protagonista “ya ni siquiera toma en cuenta el paraguas, ya se hundió, se siente perdida”.
En contraste, el momento interpretado por Faby Rojas es más personal “porque ya se cansó de que esté la luz en sus ojos, porque ella también es una y se puede proteger”.
Mientras tanto, Ana Luisa Aguilar considera a la obra una “transición de toda una vida”, que permite que el público se identifique con ella como un “montón de vivencias que de pronto te llevan a la tristeza, al depresión, a tantos prejuicios y tantas exigencias hacia la mujer que nos vuelven muy vulnerables y nos ponen una tormenta en la cabeza”.
“Mi personaje utiliza su personaje como una protección, aunque ya está muy vulnerado. Le sigue dando el apoyo que necesita, este aliento”, concluyó Anel Flores, en referencia a la resiliencia que encarna la protagonista.
“Tormenta” se presentará los días 10, 11, 17 y 18 de febrero en el Centro Cultural Teatro García Carrillo, en punto de las 20:30 horas. Tiene un costo de recuperación de 100 pesos y cupo limitado.