Hoy se estrena “The Day the Music Died: The Story of Don McLean’s” en Paramount+

Cine
/ 19 julio 2022

“American Pie” es considerada una obra maestra y se ubica entre las cinco mejores canciones del siglo compiladas por la Asociación de la Industria Discográfica de Estados Unidos (RIAA) y el Fondo Nacional de las Artes.

El cantautor estadounidense y su icónica canción “ American Pie” son el tema del documental, “The Day the Music Died: The Story of Don McLean’s ‘American Pie’”, en donde McLean narra los secretos de su obra maestra.

El documental inicia cuando un avión monomotor en el que viajaban Buddy Holly, Ritchie Valens y Jiles P. Richardson, el “Big Bopper”, cayó en un campo de maíz al norte de Clear Lake, Iowa, el 3 de febrero de 1959, falleciendo las tres estrellas de la música y su piloto.

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En aquel entonces, McLean tenía 13 años y residía en en New Rochelle, un suburbio en Nueva York. La muerte de Holly lo afectó mucho. “Estaba en shock absoluto. Puede que haya llorado de verdad”, dice en la película. “No se puede intelectualizar. Me dolió”, comentó el cantante.

Años después, McLean plasmaría ese ese dolor en “American Pie”, en la que toca su duelo por la muerte de su padre y escribiendo una elegía del sueño americano.

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En ese entonces estaba creando su segundo disco en 1971 en momentos en que en el país era atormentado por asesinatos, protestas contra la guerra y marchas por los derechos civiles. Fue así que McLean pensó que “necesitaba una gran canción sobre Estados Unidos”. Tanto el primer verso y la melodía emergieron: “A long, long, time ago...” (“Hace mucho, mucho tiempo...”).

“ American Pie” llega al climax al escuchar el coro de la canción: “We were singin’, ‘Bye-bye, Miss American pie’ / Drove my Chevy to the levee, but the levee was dry / Them good old boys were drinkin’ whiskey ‘n rye / And singin’, ‘This’ll be the day that I die’”. (“Estábamos cantando, ‘Adiós, señorita pastel americano’ / Conduje mi Chevy hasta el dique, pero el dique estaba seco / Esos buenos muchachos estaban bebiendo whisky de centeno / Y cantando, ‘Este será el día en que muera’”).

Dije, ‘Guao, eso es algo especial. No sé qué es, pero es exactamente lo que he querido tratar de conseguir, ese sentimiento sobre Buddy Holly durante todos estos años y ese accidente de avión”, explicó McLean a The Associated Press. “Siempre siento un tirón dentro de mí cada vez que pienso en Buddy”, añadió.

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El documental tiene una duración de 90 minutos e incluye imágenes de noticias de los años 70 y usa a actores como soporte en las recreaciones. En las videos se puede observar a McLean visitando el Surf Ballroom en Clear Lake, el último lugar donde tocaron Holly y sus compañeros antes de su vuelo fatal en 1959.

$!El cantautor Don McLean posa en Londres un día de abril de 1982.

Así también, hay entrevistas a otros músicos tales como Garth Brooks, “Weird Al” Yankovich y Brian Wilson, a la hermana de Valens, Connie, y el actor Peter Gallagher, la cantante británica Jade Bird, el productor cubano Rudy Pérez y el cantante cubano-estadounidense Jencarlos Canela.

Por otra parte, “The Day the Music Died: The Story of Don McLean’s” revela que lo difícil que fue grabar el disco. El productor Ed Freeman no se sentía impresionado con las canciones de McLean y tampoco consideraba que éste estuviera preparado para tocar la guitarra rítmica en “American Pie”. Algo que finalmente cedió.

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Durante dos semanas McLean y algunos músicos de sesión ensayó sin conseguir lo que buscaba, cada vez se sentía más frustrado. Fue la incorporación del pianista Paul Griffin en el último minuto lo que ayudó a que todo embonara.

Sin embargo, grabar la canción fue solo el inicio de los problemas. Debido a que “American Pie” dura 8 minutos, las estaciones de radio se negaron a tocarla provocando que el sello discográfico de McLean, Media Arts quebrara justo cuando se lanzó el disco.

Si bien, el documental responde algunas preguntas pero no todas, McLean revela que sus referencias a un rey y un bufón no están relacionadas ni con Elvis no con Bob Dylan.

En tanto McLean explica que la “banda de música” se refiere al complejo militar-industrial y el “perfume dulce” al gas lacrimógeno.

Así también, la línea del estribillo “este será el día en que mueraproviene de la película de John Wayne “The Searchers” (“Más corazón que odio”), y la despedida es un riff de “Bye Bye, My Roseanna”, una canción que cantaba su amigo Pete Seeger.

McLean pensaba a usar “Miss American apple pie” (Señorita pastel de manzana americano”), pero dejó la fruta fuera.

Para el final de la canción pide “buenas noticias”, un eco del primer verso, pero no hay ninguna.

Los tres hombres que McLean más admira, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, “tomaron el último tren para la costa”, es decir, Los Ángeles. “Incluso Dios ha sido corrompido”, comentó McLean en la película.

Estaba contento de abrirse porque él y su manager pensaron que era el momento de hacerlo y esta era la plataforma para hacerlo”, explicó el productor musical y compositor Spencer Proffer, director ejecutivo de la productora de medios Meteor 17 que ayudó a hacer la película. “Me quito el sombrero ante Don por escribir algo tan magnífico. Mi trabajo era darle vida”, añadió.

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Para McLean, la canción es un homenaje a sus influencias musicales, y también una guia para futuros estudiantes de historia.

“Si hace que los jóvenes empiecen a pensar en Buddy Holly, en el rock ‘n’ roll y esa música, y luego les enseña qué más sucedió en el país, tal vez miren un poco de historia, tal vez pregunten por qué le dispararon a John Kennedy y quién lo hizo, tal vez pregunten por qué les dispararon a todos nuestros líderes en la década de 1960 y quién lo hizo, tal vez comiencen a analizar la guerra y su estupidez. Si eso pudiera suceder, entonces la canción realmente tiene un propósito maravilloso y positivo”, concluyó McLean.

Con información de la Agencia The Associated Press.

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