‘No permitimos ningún idiota’: Dakota Johnson habla sobre su productora Tea Time
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La actriz presenta por medio de su productora Tea Time la película ‘Splitsville’, protagonizada por Adri Arjona, la hija del cantautor guatemalteco Ricardo Arjona
Más allá de la popularidad que consiguió a partir del éxito de ’50 Sombras de Grey’, Dakota Johnson ya había heredado la fama, como la hija de Don Johnson y Melanie Griffith, además de haberse criado con un padrastro como Antonio Banderas (cuando él estaba casado con Melanie). Y conociendo tan de cerca el mundo del cine, incluso ahora crea sus nuevos proyectos, con la productora propia Tea Time, estrenando ‘Splitsville’ con otra heredera de la fama como Adria Arjona (hija del cantante Ricardo Arjona y pareja de Jason ‘Aquaman’ Momoa).
¿La actriz Dakota Johnson es más fácil de convencer para protagonizar una nueva película cuando la productora es también es Dakota Johnson?
Supongo que sí (Risas). Estoy muy orgullosa con todo lo que conseguimos en estos seis años con el estilo de cine y las series de televisión de mi productora Tea Time. Pero también estoy orgullosa por la dinámica de trabajo que logramos. Es una compañía que creamos con mi mejor amiga y juntas rabajamos extremadamente bien. Es una relación muy ‘productiva’, realmente funciona. Te sseguro que es muy difícil en esta industria y en el mundo de las artes encontrar una relación así. Alguien que funciona como si fuera la otra parte de mi cerebro, como si estuviera dentro de mi cabeza y yo estuviera en la suya. Compartimos el mismo gusto y pensamos igual. Es realmente extraordinario.
¿Qué estilo de historias buscas a la hora de producir cine o series?
Bueno, tiene que ver con mi experiencia en la forma en que yo también absorbo el arte, la música, el cine o un libro, yo realmente voy hasta el fondo. Siempre imaginé un estilo de cine en el que alguien pueda pensar que se quiere suscribir al canal de Tea Time, cómo si te suscribieras a un canal con acceso a nuevos autores, con increíbles historias y escritores increíbles. Es que a mí siempre me sorprenden los autores y la idea de escribir un libro porque para mí es algo totalmente imposible. Y encontrar algo bueno así me parece magnífico. Ahora mismo tenemos una autora trabajando con nosotros que se llama Chrissy, donde recibimos las publicaciones más tempranas de sus libros. Después está el proceso de leer el libro como si fuera una canción o un museo, donde tenemos las referencias suficientes porque el autor está involucrado en el proceso, pidiendo hablar y conocer mejor el camino que recorrió para escribir el libro. Hay veces en que también tenemos fotos del proceso en que lo escribe como si tuviera una lista de sus canciones preferidas. Nuestra relación es mucho más cercana con la mente del autor.
¿Qué tan fácil o tan difícil fueron los primeros pasos en tu rol como productora? ¿Se abrieron o se cerraron más puertas por tu propia fama y la herencia de tus padres famosos?
Bueno, al principio fue un verdadero desafío que la gente me tomara en serio como productora. Y eso fue triste, realmente muy triste, muy difícil. Y digo que fue difícil porque creo que esta industria había generado demasiado glamour en mi vida y yo pensaba que era pura magia, pero al ver cómo funcionan las cosas detrás de cámara, se sintió un poco para la m... Muchos de los ejecutivos que controlan los estudios de cine no sienten el deseo de hacer algo que sea diferente o arriesgado ni peligroso o crudo y real, algo humano. Y es lo que a mí me da ganas de buscar como espectadora. Es una lucha constante, pero sigo peleando y trabajamos muy duro para tratar de contar las historias que tanto amamos.
¿Cómo es una jornada normal, como productora de cine?
Para empezar, se necesitan conocimientos muy específicos para leer mentalmente, que las mujeres en especial nos resulta tan fácil. Es algo que para nosotras fluye en todo lo que hacemos por cómo pensamos a la hora de contratar por ejemplo un equipo de filmación. En nuestro caso son todas mujeres las que trabajan con nosotros. Hasta ahora, solamente hay un hombre en nuestro equipo. Es algo que me encanta. Para mí también son importantes todas y cada una de las personas que trabajan en el estudio con nosotras, por la forma en que construimos una producción. El cine tiene mucho que ver con la energía que se genera y tenemos una sola regla: no permitimos ningún idiota. Y nos aseguramos que cada una de las personas que trabajan en la filmación sepan al detalle todo lo que estamos haciendo, para que se sientan que todos forman parte del equipo.
Dakota Mayi Johnson, nació el 8 de Octubre de 1989, en medio de uno de los tantos titulares de noticias que inspiraban sus padres. Hacía apenas cuatro meses que la madre Melanie Griffith se había vuelto a casar por segunda vez, con Don Johnson, en la misma época en que ella también había sido nominada al Oscar por ‘Secretaria Ejecutiva’ (Working Girl). A los cinco años, los padres volvieron a divorciarse y Dakota terminó criándose durante los siguientes 20 años, con la fama hispana del padrastro Antonio Banderas. Y mientras ella consiguió su propia popularidad con el superéxito de ’50 Sombras de Grey’, tampoco pudo evitar los flashes de los papparazzi con otro noviazgo tan buscado con el cantante Chris Martin (ex de Gwyneth Paltrow). Será por eso que también en el cine Dakota aprovecha el éxito de las comedias románticas, como la nueva ‘Splitsville’. Y habiendo competido en el Festival Internacional de Cannes, incluso intenta competir por el Oscar, con el respaldo del mismo estudio Neon que ganó Mejor Película, con ‘Anora’, con un estilo de comedia parecido donde también agrega ciertos rasgos de libertad sexual que había mostrado en ’50 Sombras de Grey’. Esta vez, Dakota interpreta a la esposa de un matrimonio abierto. Y en medio de una relación donde la infidelidad aparenta ser la gran clave de la felicidad, aparece en escena la complicada amistad de otra pareja que se quiere divorciar por otra infidelidad, multiplicando las complicaciones con más y más infidelidades y secretos que son mucho más divertidos, cuando dejan de ser secretos.
¿Cómo viviste la experiencia del estreno mundial de ‘Splitsville’, compitiendo por primera vez en el Festival de Cannes?
Creo que apenas dormí dos horas. Solamente estuve dos días. Nunca antes había ido al Festival de Cannes. Había estado varias veces en el Festival de Venecia y pensé que por eso no me querían en Cannes. Fue muy divertido y realmente fue asombroso ver tanta gente importante del cine, conocer nuevas personas, aunque no pude ver nada de cine en tan poco tiempo. Fue una verdadera locura estrenar en un festival tan importante con una película que nosotras mismas habíamos hecho. Fue un sueño total.
Otro rol que muy poca gente conoce es tu trabajo como directora del video musical ‘Cry Cry Cry’ de Coldplay...
Es algo que me encantó. Me divertí mucho, muchísimo. Y también fue algo muy diferente, un proceso totalmente distinto, pero pasé los mejores momentos. No sé, pero fue algo muy natural y emocionante para mí pensar que estaba haciendo algo así. Yo también trabajé con muchos directores con los cuales aprendí bastante a diferenciar lo bueno de lo pésimo (Risas). Me refiero a que sé que ‘no’ tengo que pedirle algo a un actor, porque es algo que yo también viví antes, en primera persona.
¿Es cierto que te dieron ganas de dirigir cine después de haber visto como lo había hecho Maggie Gyllenhaal cuando te dirigió en ‘The Lost Daughter’?
Tuve el privilegio de haber trabajado con muchas mujeres directoras. Si las cuento creo que llegan a una docena, fácil. Pero Maggie Gyllenhaal también es actriz y con ella sentí la forma de contar una historia como actriz. En ese momento, también me di cuenta que yo no estaba siendo la mente creativa de la historia, porque yo no puedo escribir ni tampoco sabía dirigir. Solo era una actriz. No sé realmente la razón, pero supongo que sentí que no me estaban tomando en serio hasta ese momento. Y me sorprendió lo brillante que es Maggie en su forma de escribir y su estilo de dirigir, su idioma, su poesía, la forma que habla y que también interactúa con los actores además de la forma en que ve el mundo y cómo también ve a la gente. Me inspiró tanto que pensé “Debería probar algo así”.
¿Cómo sigue tu camino con la productora Tea Time?
La actriz que interpretó a mi hija en la película ‘Cha Cha Real Smooth’, Vanessa Burkhart en realidad es una actriz autista, una brillante persona que viene trabajando en un guion de cine, algo muy especial sobre una joven con autismo. Y me siento muy protectora de su idea, su historia y su forma de pensar. Es una mujer increíble. Y es la clase de proyecto donde yo también permitiría que alguien más la dirija, ya veremos. Vanessa apenas tiene 21 años, pero escribió el guion cuando todavía era adolescente. Ni siquiera lo había terminado cuando le compramos los derechos del primer borrador. Queremos rodearla de gente que pueda llevar su idea al cine. Es lo que queremos hacer, es el incentivo que también tengo como productora. Después tengo otros temas emocionantes de los que no puedo hablar, aunque me encantaría. Solo puedo decir que todavía queda mucho por venir.