¡Hora de subir al ring! ‘Heels’, más que una historia de lucha libre
La serie cuenta las aventuras de aquellos hombres y mujeres que persiguen sus sueños en el mundo de la lucha libre profesional. La producción que estrena este 15 de agosto en Starzplay, es protagonizada por Alexander Ludwig, quien en entrevista con VMÁS nos dio más detalles.
La lucha libre en México es toda una tradición, un espectáculo que es parte de nuestras raíces y que cuenta con su propia versión en países como Estados Unidos y hasta Japón. Más allá de su localización, detrás de esta disciplina hay personas con grandes sueños, y aunque les cueste la vida, seguirán luchando por ellos. Estas historias serán contadas en la nueva serie de Starzplay, “Heels”, un drama original ambientado en el mundo de la lucha libre profesional independiente. La serie llegará a la plataforma de streaming el domingo 15 de agosto, y fue escrita y creada por el productor ejecutivo Michael Waldron, responsable de producciones como “Loki”.
“Heels” está protagonizada por Stephen Amell como Jack Spade, con Alexander Ludwig interpretando a su hermano menor, Ace. Además, Peter Segal, quien dirige varios episodios, también se desempeña como productor ejecutivo. “Heels” es una historia sobre los hombres y las mujeres que persiguen sus sueños en el mundo de la lucha libre profesional en pueblos pequeños. Es ambientada en una comunidad muy unida de Georgia, y sigue una agencia de lucha de propiedad familiar en la que dos hermanos y rivales pelean por el legado de su difunto padre. En entrevista con VANGUARDIA, Alexander Ludwig, quien da vida a Ace, nos dio más detalles sobre su personaje.
-¿A quién interpretas y cómo lo describirías?-
“Yo interpreto a Ace Spade la “estrella de rock” de la familia y el hermano del personaje interpretado por Stephen Amell, Jack Spade. Él es “la gallina de los huevos de oro” que logrará salir del pueblo en el que vive y es un luchador impresionante, pero muy dentro de sí es un desastre de grandes proporciones y un niño que todavía está intentando salir de la gran sombra oscura de su fallecido padre. Es un personaje muy complicado y explosivo. Honestamente he querido interpretarlo toda mi vida. Él es uno de esos personajes que no podía dejar pasar”.
-¿Qué crees que hace a este programa único?-
“No hay nada como esto en televisión. Cuando leí el guion dije si las personas se conectan con la familia... porque principalmente es un drama familiar. Es acerca de estos increíbles personajes lidiando con emociones de la vida diaria. Es de personas que quieren más y se les arroja a este mundo fenomenal. Al final del día siempre digo: Solo puedo hacer lo que amo, lo que vería si fuera parte de la audiencia y con lo que me conecto como actor, y espero que los demás sientan lo mismo”.
-¿Cómo fue tu preparación física para interpretar a un luchador?-
“Fue duro. Stephen y yo somos fanáticos de la lucha libre, especialmente Stephen que es un gran fanático pues practica lucha libre desde muy joven y todavía lo hace. Por mi parte, ya he trabajado con luchadores profesionales como Dwayne Jonhson y Edge Copeland, quien estuvo en Vikings conmigo. Estos hombres reciben una gran cantidad de abuso en sus cuerpos, día tras días. Tengo un increíble respeto por lo que hacen y es el único deporte donde no tiene ayuda médica. Todo corre por su cuenta si se lesionan, no hay una compañía que vaya a salvarlos porque son contratistas independientes. Cuando firmé, sabía que Stephen y yo teníamos que revindicar esta comunidad y entender que lo único falso es el resultado, e incluso eso puede cambiar, como se ve en el programa. ¿Qué hicimos para prepararnos? Ace tenía que ser una estrella de rock en el ring, así que estaba entrenando con un tipo llamado Chavo Guerrero, que proviene de una familia de luchadores muy famosa, reconocida en Los Ángeles”.
-¿Qué implicó este entrenamiento?-
“Entrenamos por meses antes de que llegara el COVID-19, nos tomamos un descanso porque no sabíamos que iba a pasar con el programa, luego nos dieron luz verde, vinimos a Atlanta, construimos un gimnasio gigante y entrenamos con un grupo de luchadores tanto profesionales como aficionados. Estaba aprendiendo de todo, desde realizar diferentes acrobacias y movimientos hasta dar la vuelta al tensor superior. Todas estas cosas, tenía que ponerlas en práctica como actor”.
-¿Qué otros desafíos trajo este papel, más allá del aspecto físico?-
“Lo más emocionante para mí de este proyecto fue que es un gran drama, y Ace es uno de los personajes más complejos, sino es el más complejo. Te encanta amarlo y te encanta odiarlo. Es uno de esos tipos con los que nunca se sabe qué lado de él vas a ver porque es muy explosivo. Para ser fiel a esa actuación, tuve que sumergirme muy profundo y asegurarme de hacer mi trabajo. Aborde todo de la misma manera. La preparación es lo más importante: presentarse habiendo desglosado el guion, los personajes y las escenas, y usar cosas de mi vida con las que puedo relacionarme y aplicar a Ace. Pero fue necesario un gran examen de conciencia, sin duda, y en ocasiones volver a ponerme en algunos lugares bastante oscuros”.
-¿Por qué crees que la lucha libre como deporte tiene tantos seguidores alrededor del mundo?-
“Es salvaje. Es enorme en, digamos, Japón y es básicamente enorme en todo el mundo. Yo se lo atribuyo al hecho de que es una historia. Todo el mundo quiere creer que las personas pueden ser mejores, porque pueden serlo. Es una interpretación de la vida frente a ti. Estás viendo a estos personajes que idolatras y contra todo pronóstico triunfan, luego en el último minuto se dan vuelta. Es esta historia constante y es la misma experiencia que tendrías si fueras a un maravilloso concierto o a cine. Es la idea de compartir una experiencia colectiva de narración e inspiración. Al final del día, lo fundamental es que la gente va a motivarse y es realmente inspirador ver lo que estos chicos pueden hacer, especialmente siendo tan grandes. No entiendo cómo estos tipos pueden hacer las cosas que hacen con sus cuerpos. Hice lo mejor que pude para acercarme a ese nivel lo más que pude, pero es realmente asombroso”.
-¿Qué te intereso aprender o te intrigo del mundo de la lucha libre?-
“Para mí, lo intrigante de la lucha libre surgió al escuchar a los otros luchadores profesionales que nos rodeaban hablar sobre su experiencia en la industria y el tipo de rutina a la que se tienen que someter a diario. También los movimientos, ya sabes, diferentes movimientos como uno que aprendí llamado “El alemán” que ves en el episodio uno donde Stephen me levanta y me tira de espaldas. Había toda una terminología y diferentes palabras que no conocía antes del programa. Eso es lo emocionante de nuestro trabajo. Tienes la oportunidad de aprender todo sobre estos nuevos mundos. Esa fue probablemente la parte más emocionante”.
-¿Piensas que podrías ser un luchador profesional?-
“Absolutamente no. Esos tipos son otra cosa. ¿Si me lo pidieran lo haría? Sí, cien por ciento, porque no dejaría pasar esa oportunidad. Creo que sería una experiencia muy divertida, pero para hacerlo de por vida tienes que ser cierto tipo de persona y suena como un trabajo muy doloroso”.