Perezoso en extremo era otro personaje de la vida real. Si callo su nombre es por discreción, no por miedo de que el sujeto pueda perseguirme: su pereza no lo dejaría
En sus fantasías de borracho imaginó que Emilia le correspondía; que ella también se había enamorado de él... Lo dejó todo: mujer, hijos, trabajo, y fue tras la belleza de aquella diosa
A mí la gente me cuenta cosas, y luego yo le cuento esas cosas a la gente. Los relatos que escribo no son tan buenos como los que escucho: les falta la escenografía
Es una piedra de material volcánico tallada para formar una superficie cuadrada, ligeramente curva, apoyada en tres patas, dos delanteras y una trasera, ésta más alta, que servía para moler el maíz con que se harían las tortillas
Aquella presentación de hombres que se vestían de mujer no sólo no les iba a gustar: iba a ser para ellos motivo de indignación, pues todos eran muy machos