Colgantes, cobijas y hasta macetas, el macramé es el must de la temporada
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Considerado un tejido milenario que fue todo un éxito en la década de los 70, ahora el macramé regresa para llenar de calidez tu hogar con su espíritu bohemio intacto. ¿Quién dijo que este tejido es solo para las paredes? Aquí te mostramos algunas ideas...
Hace algunos años, el macramé era considerada una técnica de tejido popular entre las ‘abuelitas’, sin embargo, como todas las tendencias, ahora está de regreso para conquistar los hogares millennials (y los no tanto). El macramé es una técnica artesanal que consiste en hacer nudos decorativos solo usando tus manos, existe una gran variedad de nudos y puedes utilizar algodón, yute, lino, seda u otras fibras naturales, además se pueden hacer desde colgantes decorativos hasta macetas.
Pero, ¿cómo nació el macramé? La historia del macramé data de hace unos 5 mil años en Oriente, cuando pobladores de la antigua Mesopotamia comenzaron a anudar los flecos al borde de los tapetes para decorarlos, de ahí que naciera del árabe la palabra ‘migramah’, para denominar ese arte, que significa ‘flecos anudados’, derivando, con el paso del tiempo, en la voz francesa macramé. Actualmente, el macramé sigue siendo un tejido artesanal de gran valor en todo el mundo, pues su versatilidad y belleza, ya sea en joyería, ropa, decoración o enseres del hogar, cautiva a las redes sociales.
Por si fuera poco, el macramé es una técnica DIY (Hacerlo tú mismo), ya que es muy fácil de aprender, solo necesitas un poco de paciencia y ganas de usar las manos, igualmente las tiendas de decoración actualmente cuentan cada vez más con objetos de este tipo. ¿Quién dijo que este tejido es solo para las paredes? Aquí te mostramos algunas ideas...
No hay nada más clásico que un porta maceta de macramé, que en colores neutros o beige quedarán genial con el verde de tus plantas y aportarán frescura a cualquier rincón. También puedes optar por colores vibrantes que combinen o contrasten con tu decoración actual.
Recuerda jugar con los tamaños de las macetas y sus alturas para que tus plantas sean protagonistas. Los espejos de macramé son una idea super original para darle ese toque bohemio a cualquier habitación.
Los colgantes de pared de macramé son un must para conseguir ese aire rústico y acogedor, ya sea como cabecera de tu cama, a modo tapiz o simplemente como un adorno en la pared. Es un recurso muy fácil de utilizar, que con su gran variedad de texturas y diseños aportará mucha personalidad a tus ambientes.
De seguro encontrarás diseños de sillas y hamacas en macramé que te enamoraran. Será el lugar ideal para relajarse, ya sea dentro de casa o en la terraza. Como la iluminación no podía quedar atrás, te contamos que las pantallas de macramé serán tu aliado ideal para dar ese componente natural tanto a una decoración rústica como contemporánea.
Al ser una técnica tan versátil, la puedes aplicar en infinidad de objetos. La típica es en los textiles como en tus almohadones o cortinas. Pero mira lo bien que queda vistiendo frascos o como un simpático llavero en forma de pluma. Si amas la estética boho, vintage, rústica o tropical ¡no puedes dejar pasar esta tendencia! Inspírate en estas ideas para lograr un ambiente encantador.
1.Colgantes
Las plumas colgantes en macramé son una forma especial de aportar encanto a un espacio. Bien logradas transmiten la sensación de suavidad y liviandad de las plumas reales sin generar pelusas ni deshacerse.
2. Macetas
Algunos diseños colgantes permiten que pongas tus plantas donde más te guste con la posibilidad de que giren si corre el viento. Los flecos de estos diseños suelen aportar movimiento y vida a los rincones de un hogar o espacio de trabajo.
3. Diseños modernos
Si eres de las personas que prefieren las estéticas modernas y los usos no convencionales de las técnicas, el macramé también puede adaptarse a tus preferencias. Con pocos materiales, nudos precisos y colores bien elegidos, puedes aportar sofisticación en lugares puntuales de tu casa.
4. Decoración infantil
Los arcoíris son piezas fáciles de realizar cuando comienzas y aún así resultan novedosos. En colores pasteles o más intensos, chiquitos o del tamaño de un mural, son ideales para cuartos en los que necesitas aportar un toque lúdico como los de niños.
5. Para vestir tus espejos y taburetes
Un espejo puede pasar de ser un simple objeto cotidiano a un elemento repleto de fantasía y creatividad. El macramé ayuda a vestir marcos y a aportarles toques personales a través de flores, perlas y detalles que pueden unificarlo con el resto del estilo decorativo de tu cuarto. Lo mismo con tus sillas o taburetes bajos, a los que puedes aportar más calidez y una decoración única.