Los 85 años del Llanero Solitario; del olvido a la corrección política

Durante mucho tiempo la Obertura Guillermo Tell fue considerada como medidor de cultura general y una manera de poner en evidencia la edad de las personas. Si al sonar la tonada el escucha recordaba al Llanero solitario, su nivel de cultura era considerado bajo, pero también significaba que era joven. Por el contrario, si el punto de referencia era la pieza de Giachino Antonio Rossini, se era culto y, con seguridad, de mayor edad.

Hoy ya pocos viejos y, seguramente, menos jóvenes son los que reconocen la relación entre Guillermo Tell y el famoso vaquero que se dedicaba a impartir justicia en el Lejano Oeste. Sin embargo, hoy bien vale la pena hacer un ejercicio de memoria.

El 30 de enero de 1933, el programa The Lone Ranger, debutó en la emisora WXYZ de Detroit, Michigan, presentando al mundo el legendario jinete enmascarado, en un programa que ayudó a definir el género televisivo de wéstern, e inspiró otras docenas de títulos.

Durante las siguientes décadas, el Llanero solitario aparecería en cómics, programas de televisión y películas, sin mencionar una amplia gama de productos, desde figuras de acción, hasta disfraces, pasando por libros y pistolas de juguete. 

El programa, basado en la historia de un héroe solitario que viaja a bordo de su caballo impartiendo justicia con balas de plata, rápidamente ganó popularidad y el enmascarado se convirtió en uno de los personajes más entrañables de la historia.

En 1949, el Llanero Solitario llegó a la televisión de mano de la cadena ABC, con Clayton Moore en el papel protagónico, junto a Jay Silverheels como el indio Tonto (el cual fue renombrado en México por cuestiones obvias como “Toro”), fiel aliado del jinete justiciero.

Con el tiempo la figura del personaje de antifaz y caballo blanco fue desvaneciéndose en pos de héroes nuevos impulsados por la corrección política estadounidense.

Por otro lado, los esfuerzos que han hecho para “revivir” al personaje dentro de los gustos de un público ajeno a bandoleros que montan a caballo, como el filme de 2013, protagonizado por Johnny Depp y Armie Hammer, poco han logrado al respecto.

La nostalgia por el Llanero solitario aflora en un momento en el que la historia de la conquista del oeste de Estados Unidos comienza a ser reinterpretada, luego de años de ocultamiento y velos románticos. Así mismo, sirve para recordar lo cruel de su naturaleza y la manera en la que la historia fue modificada a favor de los vencedores.