¿Orinas en la ducha? Estas son sus ventajas y desventajas
Contrariamente a la creencia popular, la orina no es completamente estéril. Contiene pequeñas cantidades de bacterias, incluso si estás completamente sano.
Orinar en la ducha, suena horrible e incluso asqueroso, pero seamos honestos, casi todos lo hemos hecho en algún momento, aunque no todos quieren admitirlo, pero orinar en la ducha es simplemente conveniente. Veamos el escenario completo: desnudos bajo el agua caliente, el sonido del agua te relaja y, de repente, la decisión es fácil: dejas que todo fluya.
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Contrariamente a la creencia popular, la orina no es completamente estéril. Contiene pequeñas cantidades de bacterias, incluso si estás completamente sano. Sin embargo, el flujo constante de agua en la ducha ayuda a diluir y eliminar estas bacterias, minimizando el riesgo de que se propaguen.
1. ¿Y qué hay del medio ambiente?
Orinar en la ducha puede ser una opción más ecológica que tirar de la cadena. Cada vez que descargas el inodoro, se utilizan alrededor de 6 litros de agua. En comparación, una ducha de 10 minutos consume aproximadamente 50 litros de agua.
2. ¿Previene el pie de atleta?
Un viejo rumor sugiere que orinar en la ducha puede prevenir o tratar el pie de atleta. Si bien la orina contiene nitrógeno, un componente común en las cremas para el pie de atleta, la cantidad presente en la orina es demasiado pequeña como para tener un efecto significativo.
3. Entonces, ¿deberías orinar en la ducha?
En última instancia, la decisión de orinar o no en la ducha es personal. No hay una respuesta definitiva de “sí” o “no”. Si te preocupa la higiene, puedes tomar medidas adicionales como limpiar la ducha después o usar un desinfectante. Desde el punto de vista ambiental, orinar en la ducha puede ser una mejor opción que tirar de la cadena, especialmente si te duchas con poca frecuencia.
Recuerda:
- Si tienes problemas para orinar, orinar en la ducha puede ayudarte a relajar los músculos de la vejiga y facilitar el proceso.
- Si crees en el rumor del pie de atleta, no hay evidencia científica que lo respalde, pero no hay nada de malo en intentarlo.
Sea cual sea tu decisión, asegúrate de que la ducha esté limpia y bien ventilada para evitar la acumulación de bacterias. ¡Al final, la decisión es tuya!