¿Sildenafil para el 14 de febrero?; cómo funciona, cómo se usa y qué riesgos tiene

Se acerca el 14 de febrero, y es muy probable que muchas parejas buscarán demostrar su amor de una forma más íntima y carnal, muchas veces todo sale bien, pero en otras, desafortunadamente, hay problemas para cumplir tal objetivo. Para ese tipo de circunstancias, este medicamento puede ser de ayuda. Pero, antes de ir a comprarlo, e ingerirlo, estas son consideraciones que deberías tener en cuenta.

El sildenafilo -en todas sus presentaciones- es un fármaco revolucionario. A pesar de considerarse innovador, lo cierto es que ya han pasado más de 20 años desde su lanzamiento. Pero, ¿qué factor ha contribuido a la popularización del sildenafil? Principalmente, que es uno de los primeros medicamentos efectivos contra la disfunción eréctil.

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Según The Journal of Sexual Medicine (2013), la incapacidad o dificultad de mantener o alcanzar una elección no solo afecta al 50 % de la población masculina mayor a los 50 años, sino que también se presenta en un poco más del 25% de los hombres con edades comprendidas entre los 25-40 años de edad.

¿Qué es el Sildenafil?

El sildenafil -conocido también como Viagra, Revatio, Herex, Clavupen, Sildenafilo o Disilden- es un medicamento inhibidor de la PDE5 (fosfodiesterasa tipo 5) que se administra por la vía oral antes de la actividad sexual para ayudar a los hombres que sufren de disfunción eréctil a lograr y mantener una erección.

En algunos casos, también podría ser prescrito para tratar la hipertensión arterial pulmonar, tal como ocurre con fórmulas similares, como el tadalafilo o Cialis.

La efectividad del sildenafil está ligada a su capacidad de aumentar el flujo o irrigación sanguínea hacia el pene, facilitando así que el usuario pueda disfrutar de una relación sexual satisfactoria.

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¿Qué función cumple?

El sildenafil es capaz de aumentar el flujo sanguíneo hacia el pene para que pueda lograr una erección. Esta elevación de la irrigación sanguínea también le permite al hombre mantener una erección rígida por el tiempo suficiente como para tener una relación sexual satisfactoria. Después del encuentro sexual, la erección desaparece por sí sola.

En sí, podría decirse que no es más que un medicamento vasodilatador que reduce las consecuencias físicas de sufrir depresión, colesterol elevado, presión arterial elevada, obesidad, diabetes o cualquier otra condición que esté relacionada con la incapacidad o dificultad de lograr o mantener una erección, como el tabaquismo, las lesiones nerviosas y el envejecimiento.

¿Cómo y cuándo tomar?

Lo ideal es tomar un comprimido de sildenafil una hora antes del encuentro sexual, ya que de esta forma se asegura que el usuario logrará una erección lo suficientemente rígida y firme como para disfrutar del encuentro; pero esta no es una regla escrita. De hecho, puede ingerirse hasta cuatro horas y media antes de tener relaciones.

Recuerda que, para que el sildenafil haga efecto, se necesita del estímulo sexual. Por tanto, no deberás preocuparte por tener una erección con tan solo ingerirlo.

Las personas que hayan presentado hipersensibilidad o alergia ante el sildenafil o cualquier otro componente de la fórmula, no deben tomar este medicamento. También está contraindicado en personas que usen nitratos, estimuladores de la guanilato ciclasa, fórmulas alfabloqueantes, inhibidores de la proteasa, antimicóticos (itraconazol, ketoconazol) o drogas “poppers”.

Advertencia. Si tomas medicamentos para la hipertensión arterial, sufres de hemofilia, anemia o úlceras estomacales, ¡comunícaselo a tu médico antes de comenzar con el sildenafil! Lo mismo ocurre si eres fumador o consumes alcohol con frecuencia.

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¿Cómo usarlo?

En casos de disfunción eréctil, la dosis inicial de sildenafil es de un comprimido de 50 mg.

El medicamento debe ingerirse una hora antes de la relación sexual.

Dependiendo de la sensibilidad del organismo ante los componentes de la fórmula, es posible que esta dosis deba reducirse a 25 mg o, por el contrario, elevarse a 100 mg.

Presentaciones y dosis

La presentación del sildenafil es, generalmente, en comprimidos o tabletas de 50 mg y 100 mg. No obstante, algunas marcas -como el Revatio- lo comercializan como suspensión.

Aunque se recomienda que el usuario tome sildenafil al menos una hora antes del encuentro sexual, lo cierto es que puede hacerlo en cualquier momento, incluso cuatro horas y media antes de tener relaciones. No obstante, es importante que no exceda la dosis recomendada, que es de una toma diaria de un máximo de 100 mg.

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Reacciones adversas y efectos secundarios

Los efectos secundarios más comunes del sildenafil incluyen: congestión nasal, dolores musculares, mareo, visión borrosa, dolor de cabeza, náuseas, malestar estomacal y dolores de espalda.

Si experimentas una pérdida repentina de la visión, priapismo -una erección de más de cuatro horas- o disminución de la audición, ¡acude a tu médico tratante de inmediato!

Algunos medicamentos pueden interferir en la metabolización del sildenafilo y causar reacciones adversas. Se ha demostrado que el uso conjunto de este medicamento con anticoagulantes, como la warfarina, podría ocasionar un sangrado anormal. Los pacientes tratados con warfarina deben recibir un ajuste en la dosis para que sildenafil no interfiera negativamente en el tiempo de coagulación de la sangre.

Si notas sangre en la orina o en las deposiciones, intensas cefaleas, moretones, mareos y debilidad, ¡acude a un centro de emergencias de inmediato!

También debes visitar una clínica o centro de urgencias si presentas dificultad para respirar, dolor de pecho o algún salpullido acompañado de hinchazón o fiebre.

Con información de Farmex