Culpa la Asociación del Rifle a la "corrección política" de Obama de matanza en Orlando

Internacional
/ 14 junio 2016

La NRA ha reiterado tras las mayores matanzas de los últimos años en Estados Unidos que la solución no es el mayor control en la venta de armas.

Tras de este ataque terrorista, el presidente Obama y Hillary Clinton (oficiosa candidata presidencial demócrata) renovaron sus peticiones de mayor control de armas, incluidas prohibiciones en la categoría de armas semiautomáticas"...

La Asociación Nacional del Rifle (NRA) culpó hoy a la "corrección política" del presidente estadounidense, Barack Obama, de la falta de medidas para prevenir la matanza de Orlando (Florida), en la que un joven armado asesinó a 49 personas.

El director ejecutivo del Instituto de la NRA por el Cambio Legislativo (NRA-ILA), Chris Cox, aseguró hoy en un artículo de opinión publicado por el diario USA Today que "la corrección política de la Administración Obama" es responsable de no haber aplicado medidas para evitar la matanza.

"Tras de este ataque terrorista, el presidente Obama y Hillary Clinton (oficiosa candidata presidencial demócrata) renovaron sus peticiones de mayor control de armas, incluidas prohibiciones en la categoría de armas semiautomáticas", apuntó Cox.

"Están desesperados por crear la ilusión de que están haciendo algo para protegernos, pero esas medidas no nos van a hacer más seguros. Estas maniobras de despiste deberían asustar a todos los estadounidenses, porque no servirán para prevenir el próximo ataque", aseguró Cox.

La NRA ha reiterado tras las mayores matanzas de los últimos años en Estados Unidos que la solución no es el mayor control en la venta de armas y ha llegado a proponer una mayor aceptación en el derecho a portarlas como respuesta a tiradores con intención de matar.

El responsable del grupo de cabildeo en defensa de la tenencia de armas más importante del país aseguró que el "islamismo radical no se ve disuadido por leyes de control de armas", y apuntó a los ataques yihadistas en París del año pasado, en los que células terroristas organizadas sembraron la ciudad de muerte y caos en dos ocasiones con explosivos y rifles automáticos.

En el caso de Orlando, el joven de 29 años Omar Mateen, ciudadano estadounidense de origen afgano, adquirió legalmente días antes de la matanza un rifle de asalto y una pistola semiautomática, sin que saltaran las alarmas en el sistema de revisión de antecedentes, pese a haber sido investigado en el pasado por posibles ideas yihadistas.

La primeras conclusiones de la investigación indican que Mateen actuó solo, sin recibir órdenes de ninguna organización terrorista, pese a que en una llamada a los servicios de emergencia declaró su lealtad al Estado Islámico (EI).

COMENTARIOS

Selección de los editores