Dillman, Malone y Meliès
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El pasado martes de nueva cuenta la muerte alcanzó a otro de los prolíficos actores norteamericanos de la segunda mitad del siglo XX como lo fue Bradford Dillman a los 87 años de neumonía.
Como varios actores de su generación, Dillman se inició en la televisión a mediados de la década de los 50, pero para finales de la misma ya estaba protagonizando sus primeras películas en la Meca del Cine teniendo el tercer crédito después del actor italiano, Rosano Brazi y la ganadora del Oscar Joan Fontaine en el drama “A Certain Smile”, de Jean Negulesco, en 1958, pero ganando el mismo año el Globo de Oro al Más Prometedor Debutante Masculino (premio que ya no se da en la actualidad) como parte del elenco del drama bélico “In Love and War”, de Philip Dunne, donde compartió créditos con actores contemporáneos suyos como Rober Wagner y el también ya fallecido Jeffrey Hunter, entre otros.
Ese reconocimiento, en verdad, impulsó su trayectoria fílmica puesto que inicia los años 60 protagonizando nada menos que bajo las órdenes del maestro Michael Curtiz (“Casablanca”) el drama biográfico “Francisco de Asís”, de 1961, y para los años 70 fue un rostro obligado en clásicos como “Escape del Planeta de los Simios” (Don Taylor, 1971); “Nuestros años felices” (Sydney Pollack, 1973), llevando el tercer crédito después del de los protagonistas Barbra Streisand y Robert Redford; “Sin Miedo a la Muerte” (James Fargo, 1976) de la serie de películas de Harry el Sucio al lado de su protagonista Clint Eastwood y protagonizando el clásico de culto “Piraña” (Joe Dante, 1978) junto a la también fallecida, a fines del 2017, Heather Menzies, el pasado 24 de diciembre a los 68 años.
De hecho fue el director de esta última, Joe Dante, quien dio a conocer el fallecimiento de Dillman via Twitter, ya que prácticamente Dillman desapareció del ojo público, desde mediados de los años 90 como parte del elenco de la serie televisiva “Reportera del crimen”, al lado de Angela Lansbury, siendo por lo mismo uno de los últimos trabajos que se le vieron en pantallas locales, para ser más específicos en el hoy desaparecido cinemas Atenea del centro de la ciudad, en el thriller “Impacto fulminante”, de 1983, otro capítulo de la serie de películas del actor Clint Eastwood como el detective Harry el Sucio que también Eastwood dirigió y donde Dillman interpretó al Capitán Briggs.
El viernes 19 la estrella hollywoodense que se apagó fue la de la memorable Dorothy Malone, a los 92 años de edad, quien por lo mismo a diferencia de Dillman luego de debutar en el cine a principios de los años 40 a mediados de la década ya estaba filmando el papel que le daría el único Oscar de su filmografía: el de una ninfómana que acechaba al personaje de Rock Hudson en el clásico “Escrito en el viento”, de Douglas Sirk, pero que tanto la marcó, que el resto de su carrera sería encasillada como femme fatale tanto para la versión televisiva de “La caldera del diablo” (”Peyton Place”), a mediados de los años 60, y no por nada su última película fue al lado de Michael Douglas y Sharon Stone en el clásico contemporáneo “Bajos instintos” (Paul Verhoeven, 1992). Descansen en paz.
Para terminar y ya que estamos haciendo tributo a fallecidos talentos del cine internacional, el pasado domingo 21 de enero se cumplieron con exactitud ocho décadas de la muerte del inolvidable mago del cine, George Meliès, el ilusionista francés convertido en director de cine a quien a partir del estreno de su cinta “El viaje a la luna”, de 1902, se le considera el padre del cine no sólo de ficción sino de ciencia ficción después de que sus compatriotas, los hermanos Lumière, lo hicieran con el documental en 1895.
Comentarios a: tesse_69@hotmail.com