Estos son los tres escenarios posibles en la moción de censura contra Mariano Rajoy
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Si el PSOE consigue mayoría absoluta (al menos 176 votos) en la votación que se celebrará hoy en el Congreso de los Diputados, Rajoy dejaría de ser presidente del Gobierno y el socialista Pedro Sánchez asumiría el cargo.
La moción de censura presentada por los socialistas españoles contra el conservador Mariano Rajoy, con la que pretenden desbancar al mandatario del Gobierno, tiene de momento un final incierto y tres escenarios posibles:
- Que la moción fracase y Rajoy siga en el cargo:
Una de las posibilidades es que el Partido Socialista (PSOE) no logre el apoyo de más de la mitad del Congreso de los Diputados, requisito indispensable para que la moción salga adelante. En ese caso, Rajoy seguiría en el cargo y la legislatura continuaría su curso.
Pero la situación tampoco sería fácil para el mandatario ya que el partido izquierdista Podemos y el liberal Ciudadanos buscan presentar otra moción para forzar un adelanto electoral si esto ocurre.
- Que la moción tenga éxito y Rajoy sea destituido:
Si el PSOE consigue mayoría absoluta (al menos 176 votos) en la votación que se celebrará hoy en el Congreso de los Diputados, Rajoy dejaría de ser presidente del Gobierno y el socialista Pedro Sánchez asumiría el cargo. Eso supondría un cambio de Ejecutivo y un escenario sin precedentes en España.
El PSOE cuenta con el apoyo de Podemos, pero no de los liberales de Ciudadanos. Por tanto, Sánchez necesita el apoyo del Partido Nacionalista Vasco (PNV), que con cinco escaños tiene la llave de la moción, y de los partidos independentistas catalanes.
- Que Rajoy se adelante y dimita para evitar ser destituido:
Una de las opciones que ha sonado con fuerza en las últimas horas, dadas las posibilidades de que la moción del PSOE prospere en el Congreso, es que Rajoy se adelante y presente su dimisión.
El propio presidente del Gobierno lo ha negado, pero incluso en sus propias filas se dice que "no es una opción descartable".
Si Rajoy dimitiera, la moción de censura quedaría invalidada y su Gobierno quedaría en funciones. El jefe del Estado, el rey Felipe VI, tendría entonces que hablar con los grupos parlamentarios para proponer a un candidato a la presidencia del Gobierno.
Desde la primera votación de investidura se abriría un plazo de dos meses para formar Gobierno. Si en ese tiempo no se consiguiera, se convocarían de forma automática elecciones generales.