"La Prima" y la constancia del cine mexicano en cines
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Con el estreno nacional mañana de “La Boda de Valentina”, de Marco Polo Constandse (“Cásese Quien Pueda”) se cumplirá un mes ininterrumpido de estrenos semanales de cine mexicano. Este hecho no sucedía a nivel local desde antes de la implementación del Tratado de Libre Comercio, que hizo cerrar en automático a los cines de Compañía Operadora de Teatros (COTSA) que estaban comprometidos por ley a no dejar de exhibir cine mexicano en sus pantallas en combinación con cine hollywoodense y extranjero en general, y de ahí que en cartelera aún coincidan las exhibiciones de remakes como “Una Mujer Sin Filtro”, de Luis Eduardo Reyes; la cinta animada “La leyenda del Charro Negro”, de Alberto Rodríguez; “Lo más sencillo es Complicarlo Todo”, del californiano René Bueno y “La Prima”, el regreso a la silla del director del cineasta de origen michoacano Víctor Ugalde. Ugalde precisamente se inició con el pie derecho en la todavía redituable industria fílmica nacional de los 80s con el éxito taquillero de su ópera prima “La Lechería”, la cual fue protagonizada por el comediante Polo Polo y la sensual Olivia Collins. Esto le permitió transitar desde la escritura de guiones de películas más sustanciosas como “¿Nos Traicionará el Presidente?”, de Fernando Pérez Gavilán, que le diera una nominación al Ariel al Mejor Guión Cinematográfico de 1988, a dirigir a la ex miss Coahuila Lina Santos en la última película en la filmografía del “Rey del Humorismo Blanco”, Gaspar Henaine “Capulina” en “Mi compadre Capulina”, de 1989, entre otras más. Por los antecedentes mencionados, no fue sorpresa que en 1994 Víctor Ugalde estrenara el último largometraje de su filmografía cuando menos en dos décadas, la comedia “Me Permites Matarte”, la última película por su parte en la filmografía de la actriz de origen venezolano Rosita Arenas cuando menos hasta el momento de escribir estas líneas, justo al entrar en rigor el mencionado Tratado de Libre Comercio de América del Norte el cineasta se convirtió en uno de los más acérrimos defensores de la cinematografía nacional y en especial de su recuperación como industria iniciando primero fideicomisos como el Fidecine y concluyendo con el más reciente Estímulo Fiscal 189 (EFICINE) que ha revitalizado la producción fílmica mexicana actual. En ese contexto, Ugalde regresa al cine con “La Prima” basándose nada menos que en el último guión cinematográfico del maestro Vicente Leñero, basado a su vez en una de las grandes obras del realismo literario del siglo XIX “El Primo Basilio”, del portugués José María Eca de Queirós, y por lo mismo el mayor problema de “La Prima” no es esta nueva adaptación al cine nacional de la obra (la primera, “El primo Basilio” es una joya dirigida por Carlos Nájera en 1934), sino que desde su título nos remite a las comedias picarescas y de doble sentido que dirigió en los 80s y 90s, y por ello recurre a falta de Olivia Collins y Lina Santos a Isabel Madow, por ejemplo, como atractivo visual y hasta humor escatológico en cuando menos un par de secuencias. Con todo, lo que defiende a “La Prima” como comedia palomera es la inclusión y algunos momentos muy divertidos de primeros actores como Jesús Ochoa o Leticia Huijara, por ejemplo, que Ugalde es evidente convocó para ser una especie de “Dos Crímenes” (Roberto Sneider, 1995) que no le salió. Comentarios a: alfredogalindo@hotmail.com; Twitter: @AlfredoGalindo