Mi esposa no quiere tener sexo... Tal vez ni siquiera está interesada en él

Pregunta:
El Día de los Enamorados fue un poco doloroso porque mi matrimonio no está funcionando bien. No es que peleemos mucho, pero tampoco es realmente maravilloso. La única pelea que mantenemos se refiere a la intimidad y el hecho de que no se dé con frecuencia. Pero me da la sensación de que ninguno de los dos se siente realmente amado o deseado. Trato de demostrarle a mi mujer que la amo, pero ella piensa que lo que quiero es sexo. Honestamente, no creo que me quiera o que tenga interés en la intimidad, incluso. Me preguntaba si usted tiene algún consejo para mejorar esta situación.

Respuesta:
Hay muchas razones por las que su pareja puede haber perdido el interés en la intimidad. Para muchas mujeres, la base del problema es que mientras los varones crecen oyendo cosas positivas sobre el sexo, la mayoría de las mujeres crece oyendo cosas negativas vergonzosas. Si una chica estaba entusiasmada con la sexualidad era vista como una zorra, y se hablaba del sexo como algo sucio y malo. Si a esto sumamos el resentimiento, los sentimientos heridos, los problemas de decepción y confianza (debido a las críticas o a las peleas) o un marido que ha estado mirando pornografía (que hace que el sexo parezca sucio) muchas pierden su interés en el tema. Otras simplemente están demasiado cansadas y al final del día no les queda nada para dar.

Es un tema complejo, y no se puede resolver en un artículo, pero es vital que usted repare la intimidad en su relación. Sin ella, no puede tener una relación saludable que prospere. A continuación, algunas cosas que cada uno en la pareja puede hacer para iniciar el proceso de reparar la intimidad en su matrimonio:

Ver a un médico o a un profesional de salud mental
Si no hay libido saludable, vaya a ver un profesional médico. Hay desequilibrios hormonales y medicamentos que afectan negativamente la pulsión sexual. También le conviene asegurarse de que no haya experiencias de abuso pasadas que están creando sentimientos negativos en torno del sexo y estos también podrían requerir ayuda profesional.

Ser amable, saber apreciar y reconocer
Para que la mayoría de las personas disfruten de la intimidad tienen que sentirse primero emocionalmente a salvo. ¿Su pareja se siente resentida, enojada, herida o burlada en algún nivel? Si usted es propenso a criticar, a ser sarcástico, a hacer comentarios negativos o si piensa que no expresa un reconocimiento positivo suficiente, eso podría ser parte del problema.

Su pareja necesita sentirse admirada, valorada, respetada y querida si quiere que lo quieran. Si usted ha tenido una decepción o se ha quejado por la falta de sexo, es posible que eso genere una decepción, llevando a tener menos interés. Las personas deben recibir elogios y aprecio por lo que son, por cómo son, para poder dar algo. No hay nada que lleve a una persona a interesarse más por la intimidad que creer que su pareja la admira y la adora. No permita que la decepción envenene la relación. Dígale a su pareja lo increíble que es.

Merecer su respeto
Si no está cumpliendo con sus responsabilidades, quizá deba asumirlas. Esto puede significar hacer ejercicio y ponerse en forma, pasar menos tiempo frente al televisor o aprender y crecer como persona. Hasta puede preguntarle a su pareja qué podría hacer para generarle una mayor admiración. Quizá quiera verlo lidiar más con sus problemas de autoestima, con su abandono, su ira y sus problemas emocionales. Esto podría implicar la búsqueda de ayuda profesional de un coach ejecutivo o un terapeuta.

Ser más generoso y afectuoso
Esto significa dejar de lado sus necesidades y ser generoso con su pareja. Para la pareja que se interesa menos en el sexo, esto significa iniciar el sexo y hacerlo con frecuencia. Si a menudo hace que la otra persona se sienta querida y le dedica tiempo, lo adorarán y lo querrán. El sexo debe ser una expresión de amor mutuo, y un sexo “a las apuradas” no hace que su cónyuge se sienta deseada. Reserve tiempo para que sea una prioridad. Sabemos que hay noches en las que no tenemos nada para dar, pero con la mayor frecuencia posible, reserve tiempo y energía para darle a su cónyuge.

Para la persona que quiere más intimidad, dar quizá signifique ayudar más en la casa y con los hijos. También puede significar honrar sus sentimientos cuando necesita una buena noche de descanso y no enojarse o quejarse cuando el otro está cansado. Muchas parejas descubren que es mejor que la parte menos interesada inicie el sexo. Sabemos que usted teme que, en ese caso, eso nunca ocurra, pero ser paciente y permitir que sea la otra persona quien quiera darle a usted podría revertir el ciclo de sentirse forzado y rechazado.

Entender la vulnerabilidad de la pareja
Cada persona tiene un nivel de comodidad diferente respecto de la vulnerabilidad. En nuestros Retiros de reparación matrimonial ayudamos a las parejas a identificar su nivel de comodidad y sus problemas de confianza en materia de intimidad. Trabajamos para eliminar el miedo que bloquea la vulnerabilidad y crear un espacio más protegido donde cada uno pueda hablar sobre la intimidad sin miedo y sin ponerse a la defensiva.

La mayoría de las veces, cuando alguien no se siente cómodo siendo vulnerable, es debido a su miedo a la inadecuación, a la imagen corporal o el miedo a decepcionar. Generalmente no tiene que ver con usted. No tome la incomodidad del otro con la intimidad como un rechazo. Es posible que su pareja necesite ayuda profesional para recomponer su valor personal antes de que pueda surgir la auténtica vulnerabilidad.

Evitar la pornografía
La pornografía daña el matrimonio de dos formas. Una, crea expectativas irreales que su pareja no puede satisfacer y genera problemas de imagen corporal y sentimientos de traición que son difíciles de superar. Si la pornografía ya generó estos problemas en su relación, es posible que ambos necesiten ayuda profesional para recomponerlos. La buena noticia es que se puede. No son el fin del mundo, pero necesitan ayuda.

Ser más indulgentes
Ambos deben dejar atrás el pasado y empezar de cero. Tiene que entender que usted no es mejor que su cónyuge. Deje de llevar un puntaje y tratar de probar que su pareja es una mala persona. Los dos tienen exactamente el mismo valor absoluto infinito. Quizá no hayan cometido los dos los mismos errores, pero usted cometió otros, y su incapacidad de perdonar es tan mala como los defectos y debilidades de su pareja. Si quiere tener también usted una buena autoestima, debe perdonar a su pareja.

Trabajar en la propia autoestima
Esto es lo más importante que puede hacer para mejorar su relación. Si tiene problemas de imagen corporal o experimenta temores de no valer lo suficiente, su miedo lo está volviendo incapaz de dar amor como necesita hacerlo. Casi todos sufrimos mucho debido a los sentimientos de inadecuación y estos sentimientos tienen que repararse si queremos una relación saludable. La mayoría de las personas necesita coaching o terapia profesional para cambiar esto. Una persona confiada puede dar mucho más en una relación que una que se siente desdichada. Aliente a su cónyuge a buscar ayuda en esta área, porque quiere verla más feliz (no sólo para conseguir más sexo). Nuestro seminario para tener más claridad es una manera excelente y poco costosa de obtener esta ayuda y mejorar el valor personal.

Comunicarse
Esto es vital para una relación saludable, pero constatamos que la mayoría de las parejas no se comunican hasta no resolver primero sus problemas de miedo y autoestima, que en realidad están generando la posición a la defensiva y las sensaciones de no estar a salvo. Una vez que cada uno lleva a cabo el trabajo personal en su autoestima y sus miedos al fracaso y la pérdida, nosotros les enseñamos a mantener diálogos de reconocimiento recíproco. Esto significa escuchar antes de hablar y reconocer el derecho del otro a pensar y sentir como lo hace.

Elegir el momento y reservarse lugar
Tanto los hombres como las mujeres necesitan una mejor comunicación para poder explorar cuál es el momento oportuno para la intimidad. Practique la empatía y pregúntese: “¿Qué ha hecho mi cónyuge en las 12 últimas horas? ¿Qué debió enfrentar? ¿Qué es lo que más necesita en este momento? En definitiva, todos ansiamos el apoyo, la conexión y el cuidado de nuestro cónyuge, pero a veces demostrar amor significa ocuparse de los platos, levantar la mesa, lavar las sábanas y cargar combustible en el auto. Asegúrese de hacer cada día algo que lleve a su pareja a sentirse valorada y querida y su cónyuge tendrá más entusiasmo en reservar tiempo para la intimidad.

Tiene que ver con el corazón, la mente y la química
Para que usted y su pareja disfruten la intimidad estos tres elementos deben estar conectados y equilibrados. Tanto mujeres como hombres deben tener una mente clara para poder realmente conectarse y reservarse tiempo para el otro.

Las mujeres suelen quedar trabadas en sus problemas de autoestima o preocupadas por los chicos. Los hombres quedan a menudo atascados en el trabajo y las responsabilidades financieras y les cuesta relajarse y estar presentes con sus mujeres. La mejor forma de conectar la cabeza, el corazón y la química es eliminar todas las distracciones -apagar los teléfonos, darse una ducha para quitarse el cansancio del día y concentrarse en el otro. Si usted está presente para su pareja y se conecta emocionalmente desde el corazón, es mucho más fácil que la química actúe.

Reparar esta parte de la relación requiere tiempo y empeño, pero la conexión y el amor al final hacen que el esfuerzo valga la pena.

Usted puede hacerlo.