Proyecto Cine a mano cumple 10 años de historias dibujadas en tinta china

Vida
/ 30 octubre 2017

Las historias surgen con espontaneidad, al poner una mancha de tinta en el proyector que le pueda sugerir algo y a partir de ello inventa un personaje, una ciudad, un animal, cualquier cosa.

cómo vivimos, cómo estamos inmersos, en qué nos encontramos, puede ser por ejemplo, toda la gente que de pronto tiene que migrar a otros lugares por diferentes causas”...

El proyecto independiente Cine a mano, dirigido por el artista plástico Arturo López “Pío”, quien crea historias a partir de tinta china y un proyector, cumple 10 años de existencia y de acuerdo con su creador, de ser, ante todo, una cuestión que dialoga con la pintura.

El artista plástico toma un proyector de acetatos, gafas oscuras y tinta china para dibujar y crear una secuencia de imágenes que se transforma al punto de “ir generando escenas, momentos, postales, que una tras otra expondrán una historia, una puesta en escena, una pequeña película”, destacó la Secretaría de Cultura federal.

“Pío” se dedica a contar historias cotidianas, ya que su interés es contar el día a día del ciudadano urbano o de las personas del campo, para así reflejar “cómo vivimos, cómo estamos inmersos, en qué nos encontramos, puede ser por ejemplo, toda la gente que de pronto tiene que migrar a otros lugares por diferentes causas”, dijo.

Las historias, que posteriormente se acompañan de música y poesía, surgen con espontaneidad, al poner una mancha de tinta en el proyector que le pueda sugerir algo y a partir de ello inventa un personaje, una ciudad, un animal, cualquier cosa.

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Destacó que el sector que le interesa bastante son los niños, al ser un público que se encuentra en formación, además de que tener contacto con esta técnica de dibujo podría interesarlos incluso para dedicarse a ella.

Arturo López se formó de manera autodidacta, aunque desde pequeño se interesó por el dibujo; comparte que en la primaria ya vendía sus creaciones hechas con acuarela, para después conocer el arte de Vincent Van Gogh, Marc Chagall y Pablo Picasso, quienes “ya de ahí no me dejaron salir nunca”.

Recordó que en sus primeras funciones quizá hacía sólo cerca de cinco dibujos, después llegó a 10, en piezas que poco a poco ha concretado en vivo, ya que Cine a mano no es un proyecto de laboratorio.

En agosto pasado, Cine a mano y Arturo López participaron en la presentación de un libro de Ignacio Padilla y además ha colaborado con Alas y Raíces de la Secretaría de Cultura.

El proyecto Cine a mano también llegó al público japonés, especialista en la tinta china, donde “la respuesta fue muy buena, se pusieron de pie y es que utilizo la tinta china de manera, a lo mejor, menos purista, me salgo como del huacal”.

Para el artista plástico, cualquier expresión artística tiene que estar pegada a la sociedad y en particular “a la gente de a pie, a contemplar tu ciudad, a contemplar a la gente, porque eso también es básico para poder construir una puesta en escena o hacer una pintura”.

De esta manera, a través de la práctica y la necedad, Cine a mano cumple 10 años de existencia de experimentar con secuencias efímeras y dibujos creados en vivo para contar historias.

Para mayor información sobre el trabajo de Arturo López se puede consultar la página “cineamano.com”.

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