Tiene cuarentena de COVID-19 lado amable; frena suicidios en Saltillo

De acuerdo con la Unidad de Integración Familiar, aunque todavía no concluye el primer mes en que se llamó al confinamiento y el aislamiento social como parte de las medidas contra el coronavirus, las llamadas al 9-1-1 por intentos de suicidio en Saltillo han permanecido similares a las reportadas en marzo.

Patricia Moreno, titular de la Unidad (Unif), informó a VANGUARDIA que mientras en marzo fueron atendidas 37 personas por intento de suicidio, las incidencias del mes de abril han alcanzado hasta el día 27 un total de 38 intentos que fueron atendidos y orientados por los agentes.

Durante la primera quincena en que la autoridad federal hizo un llamado enérgico a quedarse en casa, la Unif reportó que ya se habían registrado poco más de la mitad de intentos que los que se habían suscitado el mes pasado; sin embargo, casi al término del abril, las incidencias han permanecido similares.

La titular indica que si bien las incidencias han permanecido, los números de consumación de suicidio han ido en decremento en la Región Sureste, y aseguró que aunque la pandemia podría provocar situaciones de depresión y ansiedad, es más difícil que se registren intentos o incluso consumaciones, dado que las personas no están actualmente solas en casa.

Saltillo, que ha sido una de las ciudades más mencionadas por los eventos de consumación de suicidio, los datos muestran que en medio del confinamiento del mes de abril la incidencia disminuyó considerablemente en comparación con otros meses, e incluso con otros años.

Región Sureste

En un estudio presentado en 2018 por el Instituto Municipal de Planeación de Saltillo (Implan), se determinó que del Estado la Región Sureste es una zona con focos rojos por el alto número de suicidios.

En el análisis sobre tendencia suicida de 2017, se identificó un perfil sociodemográfico predominante: varones entre los 20-39 años, ocupados, que viven en colonias al sur, suroriente y poniente.

Destaca que es la educación con falta de límites y la inmediatez de obtener lo que se pide, ha modificado la resistencia de las personas ante una decepción, lo que como consecuencia dispara la depresión.

¿Qué dice la ley?

Artículo 9º.- Sin menoscabo de su economía o dignidad, toda persona que presente conducta suicida, o bien, que

haya fallado en su intento de suicidarse, tiene derecho a recibir de manera inmediata atención médica profesional por parte de personal calificado de la Secretaría de Salud del Gobierno del Estado.

Artículo 10.- La Secretaría de Salud deberá contar con un equipo interdisciplinario que asegure el acompañamiento

del paciente durante su tratamiento, rehabilitación y reinserción social.

Artículo 11.- En el equipo de asistencia médica podrán participar miembros de la comunidad y familiares del paciente, siempre y cuando éstos coadyuven efectivamente en su rehabilitación y observen las recomendaciones y normas establecidas para el caso por el personal médico y las propias instituciones del sector salud.

Artículo 12.- La Secretaría de Salud, en coordinación con sus diferentes jurisdicciones en la entidad y centros médicos, se asegurará de que se cumpla correctamente el respectivo protocolo de atención al paciente con riesgo suicida o con intento de suicidio, mismo que deberá contender la identificación de factores predisponentes, psicofísicos, sociodemográficos y ambientales, a fin de poder definir con certeza las mejores estrategias de atención.

Artículo 13.- En el caso de tratarse del intento de suicidio de un niño, niña o adolescente, es obligación de la institución médica que primero conozca del caso dar aviso del incidente a la Procuraduría para Niños, Niñas y la Familia (Pronnif), en aras de salvaguardar sus derechos.

Artículo 14.- Todo personal involucrado en el tratamiento a pacientes con conducta suicida, está obligado a la confidencialidad de la información.