UE aprueba normas más estrictas para Google y Facebook
Los gobiernos de la UE respaldaron la medida lanzada por la CE hace dos años para proteger las industrias creativas de Europa, que emplean a unas 11.7 millones de personas en el bloque y representan alrededor de 1 billón de dólares en negocios.
Google tendrá que pagar a los editores por sus publicaciones de noticias y Facebook deberá filtrar el contenido protegido, según las nuevas reglas de derechos de autor destinadas a garantizar una compensación justa para las industrias creativas de la Unión Europea.
Los gobiernos de la UE respaldaron la medida lanzada por la Comisión Europea hace dos años para proteger las industrias creativas de Europa, que emplean a unas 11.7 millones de personas en el bloque y representan alrededor de 1 billón de dólares en negocios.
"Cuando se trata de abordar el mercado único digital de Europa, la reforma de los derechos de autor es la pieza faltante del rompecabezas", dijo el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, en un comunicado.
Bajo las nuevas normas, Google y otras plataformas en internet tendrán que firmar acuerdos de licencia con músicos, intérpretes, autores, editores de noticias y periodistas para usar sus trabajos.
El mes pasado, el Parlamento Europeo dio luz verde a una propuesta que ha enfrentado a la industria creativa de Europa con empresas tecnológicas, activistas de internet y grupos de consumidores.
Wikipedia bloqueó varios sitios europeos en protesta el mes pasado, mientras que el cambio fue rechazado por Finlandia, Italia, Luxemburgo, los Países Bajos, Polonia y Suecia.
Pero 19 países, entre ellos Francia y Alemania, respaldaron la nueva estructura. En tanto, Bélgica, Estonia y Eslovenia se abstuvieron.
Según el nuevo régimen, YouTube, Facebook y otras plataformas que comparten información y contenidos tendrán que instalar filtros para evitar que los usuarios carguen materiales con derechos de autor.
Google dijo que las nuevas reglas perjudicarán las economías creativas y digitales de Europa, mientras que críticos indicaron que las medidas más estrictas afectarían a compañías más pequeñas y con menores recursos, en lugar de a los gigantes tecnológicos.