Una avalancha de dudas crea la apertura del expediente del asesinato de Colosio

Nacional
/ 30 enero 2019

    Uno de los datos sorprendentes es el parte de los hechos que está firmado por nueve agentes federales, aunque siete de ellos reconocieron que no estaban en el sitio donde fueron los disparos.

    La desclasificación del expediente del asesinato en 1994 del entonces candidato presidencial Luis Donaldo Colosio aporta numerosos detalles hasta ahora desconocidos por la población mexicana, que generan contradicciones sobre la versión oficial de los hechos.

    "No somos peritos, pero desde una perspectiva periodística hubo cosas que nos llamaron la atención y quisimos complementar la versión oficial", explicó a Efe Laura Sánchez, periodista de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), asociación que consiguió el acceso a los documentos.

    Tras casi un año intentando recopilar documento a documento y pagando para poder recibirlos, finalmente en noviembre un comité judicial determinó desclasificar el expediente y entregárselo completo a MCCI.

    El archivo consta de casi 10,000 páginas entre las que se encuentran documentos inéditos como careos, testimonios, fotografías o vídeos que ofrecen datos que resultan incongruentes con lo que hasta ahora se sabía tras la publicación en el 2000 de cuatro tomos que resumían el proceso penal.

    Después de la detención del asesino confeso, Mario Aburto, que asestó dos disparos a quemarropa a Colosio en un mitin en la fronteriza ciudad de Tijuana el 23 de marzo de 1994, la que había sido novia de Aburto dijo que éste le había hablado sobre la pistola que tenía.

    Sin embargo, en un careo que figura en el expediente, el asesino le pidió que dijese la verdad a pesar de que le hiciesen escoger entre su familia y él, ante lo que la joven se derrumbó y reconoció no saber nada acerca del arma.

    Otro de los datos sorprendentes es el parte de los hechos que está firmado por nueve agentes federales, aunque siete de ellos reconocieron que no estaban en el sitio donde fueron los disparos.

    Aburto, que cumple condena en un centro penitenciario mexicano, estuvo preparándose para ejecutar el asesinato tiempo antes, según se dijo en la sentencia, y así lo confirmaron dos primos del mismo, pero más tarde se retractaron y explicaron que agentes federales les dijeron que acabarían en un hoyo si no apoyaban esa versión.

    Estos y muchos otros son los nuevos datos, respaldados por documentos oficiales, que MCCI ha puesto a disposición de la ciudadanía en su página web, además de ofrecer un reportaje estructurado en 9 capítulos que resumen las incongruencias que ha causado la desclasificación de este informe.

    "Es importante porque este expediente es ahora de todos los mexicanos", comentó la periodista Sánchez.

    Para ella, que se pueda acceder libremente al archivo del caso, abre la posibilidad de que las personas interesadas o especializadas sigan investigando ahora con información precisa "más allá de los resúmenes que contenían los cuatro tomos de la versión oficial”.

    Además, la asociación está esperando a que les lleguen 213 videos inéditos que contiene el expediente, los cuales serán analizados y ofrecidos al público para así poder "arrojar más luz ante este nuevo panorama", aseguró Sánchez.

    Colosio era considerado seguro sucesor del presidente Carlos Salinas de Gortari debido al férreo control que el PRI mantenía sobre el Gobierno.

    Aunque se detuvo en el momento al presunto asesino material, Mario Aburto, quien actualmente cumple una condena en prisión, las investigaciones se prolongaron durante años en busca de un posible autor intelectual o de un complot.

    Su asesinato se considera el magnicidio más grande en México desde 1928, cuando fue asesinado el presidente electo Álvaro Obregón, quien ya había sido presidente en el periodo 1920-1924.

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