¡Así es como empieza la diabetes! Signos que nunca debes ignorar
La diabetes es una enfermedad crónica que ocurre cuando el cuerpo no puede regular adecuadamente los niveles de glucosa (azúcar) en la sangre. La glucosa es una fuente principal de energía para el organismo, y su control depende de una hormona llamada insulina, producida por el páncreas.
En personas con diabetes, este sistema de regulación falla, ya sea porque no se produce suficiente insulina, porque las células del cuerpo no responden correctamente a ella, o ambas cosas. Esto provoca niveles elevados de glucosa en sangre, conocidos como hiperglucemia, que pueden dañar órganos y sistemas si no se controlan.
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SIGNOS QUE NO DEBES DEJAR PASAR:
1. Micción excesiva (poliuria)
La glucosa elevada en la sangre se filtra por los riñones, pero no puede ser completamente reabsorbida. Esto lleva a que el cuerpo elimine más agua para diluir el exceso de glucosa, resultando en micciones frecuentes.
2. Boca seca y sed excesiva (polidipsia)
La pérdida de líquidos por micción excesiva lleva a deshidratación, lo que activa la sed como mecanismo de compensación.
3. Hambre excesiva (polifagia)
Ocurre porque las células del cuerpo no pueden utilizar adecuadamente la glucosa como fuente de energía, lo que provoca señales al cerebro para comer más.
4. Curación lenta
La hiperglucemia afecta la circulación y debilita el sistema inmunológico, ralentizando la capacidad del cuerpo para sanar heridas.
5. Fatiga
La incapacidad de las células para absorber glucosa lleva a una falta de energía constante.
6. Visión borrosa
Los niveles altos de glucosa pueden alterar la forma del cristalino y el equilibrio de líquidos en los ojos.
7. Infecciones frecuentes
La glucosa elevada debilita el sistema inmunológico y proporciona un entorno propicio para el crecimiento de bacterias y hongos.
8. Hormigueo y entumecimiento en las extremidades
Es un signo de neuropatía diabética, un daño a los nervios causado por niveles altos de glucosa.
9. Falta de concentración
Los niveles fluctuantes de glucosa afectan el funcionamiento cerebral, causando niebla mental o dificultad para pensar con claridad.
10. Pérdida de peso inexplicable
Si las células no obtienen energía de la glucosa, el cuerpo empieza a usar las reservas de grasa y músculo como fuente de energía.
11. Disfunción eréctil
Se debe al daño a los nervios y vasos sanguíneos causado por la diabetes, así como a problemas hormonales asociados.
12. Irritabilidad
La glucosa descontrolada puede afectar el equilibrio químico del cerebro, causando cambios de humor y estrés.
13. Piel seca y con picores
La deshidratación y la mala circulación afectan la hidratación de la piel, haciéndola más propensa a irritarse.
14. Exceso de grasa abdominal
La resistencia a la insulina se asocia con el almacenamiento de grasa en el área abdominal.
POR QUÉ ES PELIGROSA LA DIABETES
La diabetes no controlada puede llevar a complicaciones graves, como enfermedades cardiovasculares, insuficiencia renal, ceguera, amputaciones y problemas neurológicos. También aumenta el riesgo de infecciones y complica otras condiciones médicas. Un manejo adecuado con dieta, ejercicio, medicamentos y control regular puede prevenir estas complicaciones y mejorar la calidad de vida.
ASÍ PUEDES PREVENIR LA DIABETES
La prevención de la diabetes, especialmente la tipo 2, está estrechamente vinculada a adoptar un estilo de vida saludable que ayude a mantener niveles óptimos de glucosa y un peso corporal adecuado. A continuación, se detallan las principales estrategias:
1. ADOPTAR UNA ALIMENTACIÓN SALUDABLE
Consumo balanceado: Priorizar frutas, verduras, granos integrales, proteínas magras y grasas saludables. Reducir el consumo de azúcares añadidos y alimentos ultraprocesados.Porciones moderadas: Controlar las cantidades para evitar excesos calóricos.Índice glucémico bajo: Optar por alimentos que liberen glucosa lentamente, como avena, legumbres y vegetales.
2. MANTENER UNA ACTIVIDAD FÍSICA REGULAR
Ejercicio aeróbico: Caminar, nadar o andar en bicicleta durante al menos 150 minutos por semana.Entrenamiento de fuerza: Incorporar ejercicios de resistencia 2-3 veces por semana para mejorar la sensibilidad a la insulina.Evitar el sedentarismo: Reducir el tiempo prolongado sentado; levantarse y moverse cada 30 minutos.
3. CONTROLAR EL PESO CORPORAL
Meta de peso saludable: Perder incluso un 5-7% del peso corporal en personas con sobrepeso puede reducir significativamente el riesgo de diabetes.Grasa abdominal: Reducir la circunferencia abdominal mediante ejercicio y una dieta baja en carbohidratos refinados.
4. MONITOREAR LA SALUD REGULARMENTE
Chequeos periódicos: Realizar análisis de glucosa en sangre, especialmente si tienes antecedentes familiares o factores de riesgo.Identificar prediabetes: Si se detecta, seguir un plan de manejo para prevenir su progresión.
5. EVITAR EL CONSUMO EXCESIVO DE ALCOHOL Y TABACO
Alcohol moderado: Limitarlo a una cantidad mínima o evitarlo, ya que puede afectar los niveles de glucosa.Dejar de fumar: El tabaco aumenta la resistencia a la insulina y el riesgo de complicaciones cardiovasculares.
6. GESTIONAR EL ESTRÉS
Técnicas de relajación: Practicar yoga, meditación o respiración profunda para reducir el cortisol, que puede aumentar los niveles de glucosa.Dormir bien: Asegurarse de dormir 7-8 horas por noche para mejorar el control metabólico.
7. TRATAMIENTO DE CONDICIONES SUBYACENTES
Hipertensión y colesterol alto: Manejar estos factores con dieta, ejercicio o medicamentos según lo indicado por un médico.Síndrome metabólico: Tratar los componentes como obesidad central y resistencia a la insulina.
8. EVITAR LA AUTOMEDICACIÓN
Nunca tomar medicamentos para el control de la glucosa sin supervisión médica, ya que puede generar más riesgos que beneficios.