Coahuila: Uso excesivo del celular es una adicción y deriva en estrés, obesidad e hipertensión: expertos

El uso excesivo e indiscriminado del celular y otros dispositivos electrónicos ya debe considerarse como una adicción, porque generan cuadros como cualquier sustancia adictiva; si la persona, es decir, el paciente, no los manipula, no los tiene a la mano, le genera ansiedad, estrés, deja de hacer sus actividades diarias y pierde funcionalidad.

El estrés puede desencadenar padecimientos cardiovasculares, hipertensión y diabetes, y al utilizarlos por horas al día se deja de lado la actividad física, lo que acarrea problemas de sobrepeso y obesidad.

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“El estrés por supuesto que altera la presión arterial, la regulación de la insulina, del cortisol, entonces, puede ser factor y si el paciente ya tiene una predisposición genética, puede catapultar a que se exprese la enfermedad”, advirtió el psiquiatra Christian Arellano Troncoso.

“Si en lugar de salirse a jugar están metidos en los videojuegos, en el celular, por supuesto que se altera el metabolismo, es obvio, lo vemos actualmente, por eso hay más estrés, más obesidad, por el tipo de vida que llevamos”.

En países europeos se propone limitar el manejo de los dispositivos en niños y adolescentes, incluso en menores edades están completamente contraindicados, pero en nuestro país los padres prefieren que los hijos chiquitos se entretengan con el celular, en vez de ponerles atención, y se van forjando malos hábitos.

“Los neurobiólogos dicen ‘darle un celular a un niño es como darle a un adolescente un frigobar lleno de cerveza’, entretente y a mí no me generes conflicto, pero ¿a qué riesgo? a que se haga adicto al alcohol. Es lo mismo con un niño que le dan el celular para que se entretenga, le va a generar conductas adictivas”.

Los niños menores de 3 años no deberían tener acceso a ningún dispositivo de tipo electrónico, ni a la televisión y menores de 6 años no deben tener acceso ni a tableta ni a videojuegos; a los 9 años debe supervisarse el uso de videojuegos, pero sin acceso a celulares, tabletas ni ordenadores, y a los 12 años ya puede permitirse el manejo del internet, pero por tiempo limitado y bajo supervisión de los padres.

Otra mala costumbre es poner los celulares en la mesa a la hora de comer porque se provoca una especie de aislamiento en lugar de convivir y compartir, se genera un desapego.

Asimismo, recomendó no utilizar los dispositivos electrónicos en la cama y deben dejarlos de usar media hora o una hora antes de acostarse, pues la luz que emiten y los estímulos visuales que presentan hacen que el cerebro se mantenga más alerta, se inicia una actividad cerebral que impide conciliar el sueño.

“No sé por qué hay la mala costumbre de tener televisión en el cuarto y de ponerse a trabajar con la computadora o la tableta ya acostados y a veces hasta con la luz apagada. La luz solar por sí misma es un factor estimulante para que el cerebro se active, la luz que generan los aparatos electrónicos pues más”.

“El cerebro se debe acostumbrar a que la cama es para dormir, ni siquiera se debe leer en la cama y tampoco se debe comer acostados. El sueño es un proceso de recuperación del cuerpo, obviamente, si no dejamos descansar al cuerpo, no hay un adecuado desarrollo neuronal y del crecimiento celular.

Definitivamente, en una persona que no duerme bien su desempeño neurobiológico y neurofisiológico va a estar alterado y es más propensa a enfermar física y emocionalmente. “El sueño es un revitalizador, un reseteo nocturno de nuestra actividad cerebral, de nuestros neutransmisores”, concluyó el especialista.