De altos vuelos: Empresario pronostica crecimiento industrial del 100% en el noreste del México

Enrique Javier Garza Cantú, director de la compañía Aeronaves TSM, con sede en el Aeropuerto Internacional Plan de Guadalupe, en Ramos Arizpe, aseguró que el Noreste del País crecerá 100 por ciento industrialmente en los próximos 10 años, y los egresados del Tecnológico de Monterrey Campus Saltillo, serán factor importante en ese proceso económico.

En el ITESM enseñan a pensar de manera global y en grande, con visión a largo plazo y con un compromiso social para aprovechar las oportunidades del mercado a nivel nacional e internacional, afirmó.

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“El Tec me hizo fuerte, más fuerte que los demás. Después de casi 30 años me sigo sintiendo igual, más fuerte y más preparado que el promedio”, indicó, al señalar que los egresados del ITESM forman parte de generaciones que tienen en sus manos el futuro del Estado y del País.

Como parte de la fundación de Aeronaves TSM, una de las empresas de carga más grandes de Latinoamérica, con más de 80 aeronaves que realizan cerca de 10 mil vuelos por año, recordó que hace 30 años empezó el Tratado de Libre Comercio y, en lo personal, se inspiró en el legado de don Eugenio Garza Sada, fundador del plantel, para pensar en grande.

“Saber de su honestidad, su compromiso social, su sencillez y humildad era inspirador. Conocer su Ideario Cuauhtémoc era como una Biblia para mí, muchas gracias al Tecnológico de Monterrey por tocar mi vida de esta forma”, dijo Garza Cantú.

“Hace 30 años México vivía una etapa del TLC. No sabíamos lo que era, lo que el futuro iba a traer, pero después de 30 años México es un País muy distinto. Hemos disfrutado de la bonanza del comercio con Estados Unidos y Canadá”, recordó.

Las generaciones de egresados del Tec han sido parte fundamental de la transformación del País para convertirlo en la economía más fuerte de Latinoamérica.

“Con el nuevo Tratado de comercio, México será más grande y más importante para la región. Pronostico que el Centro y el Noreste de México crecerán al 100 por ciento industrialmente en los siguientes 10 años”, dice.

De los egresados del Tec dependerá que el crecimiento sea del 150 por ciento, siendo generadores de desarrollo y del cambio gracias a la excelente preparación académica que reciben en las aulas, dice.

Garza Cantú, licenciado en Administración de Empresas y quien recibió el Premio al Mérito Ex-A-Tec por parte del ITESM Campus Saltillo, recomendó a los egresados leer y memorizar el Ideario Cuauhtémoc, que es la guía para triunfar en la vida.

El escrito es un compendio de 17 principios y conceptos personales bajo la supervisión de Garza Sada para trascender y generar valor económico y social en la comunidad. Garza Cantú incluiría uno más: “Hagan lo que hagan, amen a México, a su familia y a su comunidad”.

IDEARIO CUAUHTÉMOC

1. Reconocer el mérito en los demás. Por la parte que hayan tomado en el éxito de la empresa y señalarlo de manera espontánea, pronta y pública. Usurpar ese crédito, atribuirse a sí mismo méritos que corresponden a quienes trabajan a las órdenes propias, sería un acto innoble.

2. Controlar el temperamento. Debe tenerse capacidad para dirimir pacífica y razonablemente cualquier problema o situación, por irritantes que sean las provocaciones que hay que tolerar. Quien no domina sus propios impulsos, no puede dirigir una empresa.

3. Nunca hacer burla. De nadie ni de nada. Evitar las bromas hirientes o de doble sentido. La herida que asesta un sarcasmo nunca cicatriza.

4. Ser cortés. No protocolario, pero sí atento a que los demás encuentren gratos los momentos de la propia compañía.

5. Ser tolerante. De las diversidades que puedan encontrarse en la raza, color, modales, educación o idiosincracia de los demás.

6. Ser puntual. Quien no puede guardar sus citas, muy pronto se constituirá en un estorbo.

7. Si uno es vanidoso, hay que ocultarlo. Como el secreto más íntimo. Un ejecutivo no puede exhibir arrogancia ni autocomplacencia. El orgullo antecede a la caída.

8. No alterar la verdad. Lo que uno afirme, debe hacerlo reflexionando, y lo que prometa, debe cumplirlo. Las verdades a medias pueden ocultar errores, pero por poco tiempo.

9. Dejar que los demás se explayen. Especialmente los colaboradores, hasta que lleguen al verdadero fondo del problema, aunque tenga que escuchárseles con paciencia durante una hora.

10. Expresarse concisamente. Con claridad y completamente, sobre todo al dar instrucciones, nunca estorba un buen diccionario a la mano.

11. Depurar el vocabulario. Eliminar las interjecciones. Las voces vulgares y los giros familiares debilitan la expresión y crean malentendidos.

12. Asegurarse de disfrutar el trabajo. Es muy legítimo tener pasatiempos predilectos e intereses en otras cosas, pero si se estima como un sacrificio acudir a trabajar, lo que se necesita es un descanso y otra compañía en donde laborar.

13. Reconocer el enorme valor del trabajador manual. Cuya productividad hace posible la posición directiva y afirma el futuro de ambos.

14. Pensar en el interés del negocio más que en el propio. Es buena táctica. La fidelidad a la empresa promueve el propio beneficio.

15. Análisis por encima de la inspiración o de la intuición. Este debe ser el antecedente para actuar.

16. La dedicación al trabajo. Beneficia al individuo, a la empresa y a la sociedad entera.

17. Ser modesto. Si no se comprende que nada tienen que ver con el valor de la persona el tamaño del automóvil, de la casa o del número de amigos y de clubes a los que se pertenece, o los lujo y el rótulo de la puerta del despacho, y si estas cosas significan para uno más que la tarea bien y calladamente cumplida y los conocimientos y el refinamiento espiritual para adquirirlos, entonces se precisa un cambio de actitud o de trabajo.