En Coahuila, las clases a distancia por pandemia de COVID-19 dejan secuelas emocionales
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En Coahuila, de acuerdo con el informe de la Mejoredu sobre “Las experiencias de las comunidades educativas durante la pandemia (versión 2022), la situación emocional de los actores con relación a la dinámica educativa que cambió drásticamente, pues trasladar sus actividades escolares les dejó, entre otras cosas, estrés, tensión y preocupación.
Según el documento presentado a inicios de este ciclo escolar, las respuestas a preguntas relacionadas con los aspectos emocionales, así como otras opiniones ofrecidas libremente, revelan malestar durante el trabajo desde casa. El 61.9 por ciento de estudiantes y 50.8 por ciento de docentes refirieron sentirse tensos con frecuencia por las actividades de sus respectivos papeles educativos.
Mientras que el 53.6 por ciento de los estudiantes y en y 51.1 por ciento de los docentes mencionaron que, con frecuencia, sentían que tenían tantas actividades que no podían terminarlas.
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“En general, las y los estudiantes reportaron situaciones emocionales negativas en mayor proporción que los otros actores, mientras que el personal directivo lo hizo en menor proporción.
Muchos docentes destacaron el estrés y el cansancio al que fueron sometidos en el periodo de contingencia por la sobrecarga de trabajo. Algunos informaron sentirse agobiados y molestos, y consideraron excesiva la exigencia de tomar algunas capacitaciones o estar en videoconferencias con sus autoridades educativas”, señala el informe.
Por otra parte, agrega que “las y los estudiantes expresaron sentir mucha presión por la cantidad de actividades que debían llevar a cabo y por la sensación de no estar aprendiendo, además de que su esfuerzo no era reconocido”, dijo. Mientras que algunas de las consecuencias que actualmente padecen los maestros, tras el regreso a clases presenciales son las alteraciones de sueño y apetito.
“Las dificultades de sus familias en el campo económico o de salud, incluyendo fallecimientos, fueron señaladas como factores que provocaron malestar emocional. En un número pequeño de casos, pero revelador, se expresaron de forma exacerbada los sentimientos anteriores y se manifestaron cuadros de ansiedad, depresión, pérdida del sentido de la vida y deseos de no continuar con ella”, apunta.
A DISTANCIA
En marzo de 2020 y como consecuencia de la pandemia a causa del COVID-19, en Coahuila la mayoría de las escuelas adoptó el sistema de clases virtuales.
Profesores y maestros debieron aprender el manejo de programas para unos, impartir las clases y los otros para conectarse.
Este sistema emergente de impartir la cátedra trajo como consecuencia un rezago educativo dl 60 por ciento, según las mismas autoridades educativas.
Otra consecuencia negativa de las clases a distancia, fue la deserción escolar, contabilizándose 33 mil ausencias desde marzo de 2020 hasta abril de 2022.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Educación estatal (Sedu), con la pandemia desertó un 11.5 por ciento de la población estudiantil de educación Media Superior, mientras que en educación Básica el abandono fue del tres por ciento.
EFECTOS DE LA EDUCACIÓN A DISTANCIA
Estrés, tensión y preocupación provocó entre alumnos y maestros la migración a clases a distancia.
61.9% de alumnos y el 50% de los profesores confiesa haber sufrido de tensión.
53.6% de alumnos y el 51% de maestros se vieron rebasados de trabajo.
Algunos maestros confiesan haberse sentido agobiados al exigírseles tomar capacitaciones por parte de las autoridades educativas.
Estudiantes se sintieron presionados y saturados por las cargas de trabajo.
Otros sentimientos que padecieron fueron: ansiedad, depresión incluso hasta deseos de no continuar viviendo.
Fuente: Informe de Mejoredu.