¿Inició la ‘temporada’ de avistamientos de osos en Saltillo? No existe como tal, pero cada vez hay más

El director de Desierto Viviente Fernando Toledo, declaró que ya es cada vez más común ver osos en las carreteras o cerca de la urbanización en Saltillo.

Luego del hallazgo de un ejemplar atropellado este viernes en la carretera a Zacatecas, el encargado de la fauna en el Museo del Desierto aclaró que no hay una temporada de avistamientos específica.

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En entrevista para VANGUARDIA explicó que con el calor los animales bajan de la montaña para buscar agua y alimento, situación que se presentó con mayor frecuencia el año pasado entre los meses de agosto y noviembre.

“Ya tenemos que aprender a convivir con estos animales porque no son incidentes aislados de uno o dos por año. Están siendo recurrentes los encuentros con osos y entonces tenemos que tener nosotros la cultura y el respeto hacia estos animales”, aclaró.

El empleado del Mude señaló que atropellar a un oso, además de afectar la fauna silvestre, es peligroso para los automovilistas pues los ejemplares pueden llegar a pesar más de 100 kilos.

Añadió que si bien los osos buscan vivir en zonas boscosas donde hay pinos y encinos, se ha detectado también un desplazamiento “inusual” ante la falta de agua y alimento, por lo que se les ha visto en zonas de matorral buscando tunas, nopales y sotoles.

En ese sentido mencionó que cuando las personas que viven o se establecen en zonas de Saltillo cercanas a la Sierra de Zapalinamé como Lourdes, Mirasierra o Teresitas, dejan su basura a la vista, atraen a los osos por su gran capacidad olfativa.

Agregó que hay otros sectores como la carretera hacia Huachichil, el tramo de Los Chorros y la carretera a Monclova en la zona de La Muralla donde son más comunes estos avistamientos.

El especialista añadió que hay otras vialidades donde incluso hay letreros en los que se indica la constante presencia de osos.

“Los letreros son básicamente para que los automovilistas bajen la velocidad y tengan oportunidad de esquivar cualquier tipo de animal que pueda cruzar por ahí”, detalló.

Toledo declaró que cuando un oso se acerca a las ciudades es común que salga lastimado pues los balean, los atropellan o los intentan capturar.

Es por ello que recomendó no darle de comer ni de beber a los ejemplares, pues van a volver al mismo sitio buscando alimento o agua y no siempre es seguro que regresen a su hábitat natural con vida.

Aclaró que si bien no hay un estudio formal al respecto, se estima por los avistamientos y el comportamiento reciente que sí hay una “buena” cantidad de osos en el estado.

El especialista mencionó que las mismas recomendaciones aplican para otro tipo de animales como venados o incluso pumas que puedan bajan a la ciudad, pues otro tipo de reportes como son los casos de los reptiles no sobreviven a los atropellamientos.

LO HABRÍAN LLEVADO AL MUDE

Fernando Toledo explicó que de haber sobrevivido, el ejemplar habría sido llevado a recuperarse al Museo del Desierto, donde atienden a osos y otro tipo de animales heridos.

Aclaró que la intención es que no permanezcan en el museo y que por el contrario se reintegren lo antes posible a la vida silvestre.

No obstante, también explicó que volver a introducirlos a la intemperie es una acción que se debe coordinar con otras dependencias gubernamentales como la Profepa o la Secretaría del Medio Ambiente de Coahuila.