Reivindican el oficio de la nota roja con ‘Entre zopilotes. Apuntes de un reportero policiaco’

La nota roja —y los reporteros que las producen— está rodeada de prejuicios. Desde su contenido hasta las cabezas que, más allá de lo que se pueda opinar de ellas, nunca carecen de ingenio.

El libro “Entre zopilotes. Apuntes de un reportero policiaco” (UANL, 2023) de Ricardo Mendoza Reséndez busca aclarar los procedimientos, la historia y los estigmas alrededor de este oficio que como todas las aristas del periodismo tiene en su seno el deber de informar.

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El ensayo, que recopila tanto las experiencias del autor como de otros reconocidos reporteros del área a lo largo de 40 años, se presentó este martes en la Sala Armando Sánchez Quintanilla de la Feria Internacional del Libro Coahuila 2023.

El evento contó con los comentarios del periodista y editor Ramón Alberto Garza, así como del director general de VANGUARDIA, Armando Castilla, con la moderación del también periodista Carlos Arredondo Sibaja.

“La nota roja y los medios populares son críticos para el desarrollo de nuestro país”, aseguró Castilla en su intervención, “definitivamente cubrir la nota roja para cualquier reportero puede ser el final de su historia en la redacción o su inicio, porque en cualquiera de esas etapas, como lo dicen las entrevistas de esta, muy buena, selección [...] existe esa garra, esa pasión, por estar adelante, esa hambre, a pesar de que han ganado todas las tecnologías”.

Garza, por su parte, quien ha estado al frente de las redacciones de medios como El Norte, Reforma y El Universal, recalcó a partir de una frase de Gabriel García Márquez “si quieres triunfar en la vida, aprende a contar el cuento” la manera en que Mendoza hila las experiencias propias y ajenas para establecer este panorama de la nota roja como algo más que un contenido sensacionalista.

El autor, en su intervención, reconoció las contradicciones del oficio pero reiteró que esto mismo lo refleja el libro. Desde cada una de las declaraciones de los periodistas entrevistados, estos hablan de lo que implicó, sin victimizarse, ser parte de tal práctica; sus aciertos, arrepentimientos y hasta la responsabilidad en la normalización de la violencia en el país.

“Lo que traté de capturar es la esencia del periodista policiaco”, dijo Mendoza, “el periodista que más allá de estos peligros que representa el crimen organizado, todos los días llegaba y su jornada se basaba en explorar, en investigar, ese aspecto tan negativo como especie, que son todos esos casos y todas esas situaciones en las que nadie quisiera estar y en las que en determinado momento todos, como individuos y como sociedades, llegamos a quedar atrapados”.

Asimismo, habló sobre la forma en que incluso los cambios de paradigma en las sociedades actuales han modificado la manera en que se aborda el oficio mismo, sobre todo en el ámbito de la salud mental, que en el marco del eje temático de la FILC, es un factor que cada vez entra más en juego en este oficio.