Saltillo: don Herminio queda en libertad; disparó en legítima defensa, concluye juez
Luego de la agresión don Herminio aseguró que él mismo se entregó ante las autoridades y en ningún momento huyó, pues esperó a que llegara la ambulancia para que se llevaran a Enrique a un hospital
Finalmente quedó demostrado que Herminio “N” disparó en legítima defensa en contra del hombre que se metió a su propiedad con la intención de agredir, por lo que una juez dictó la no vinculación a proceso y el habitante del ejido Santa Rita de Saltillo logró obtener su libertad.
Cerca de las 6:00 de la tarde don Herminio abandonó las instalaciones del Centro de Justicia Penal, donde permanecía acusado por el delito de homicidio calificado.
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Para resolver la investigación, los abogados defensores del acusado Víctor Hugo Mora Jurado y Miguel Ángel Campos Cortez solicitaron la comparecencia de tres testigos en la audiencia de vinculación a proceso que se efectuó en la sala penal número 9.
Uno de ellos aportó vídeos de la agresión que se registró el miércoles 9 de noviembre dentro de la propiedad de don Herminio que se localiza en el ejido Santa Rita.
También se presentaron pruebas de denuncias anteriores de agresiones físicas y amenazas cometidas en su contra.
Asimismo, se tomaron en cuenta las circunstancias de modo, tiempo y lugar que se reflejaron en los datos contenidos en el Informe Policial Homologado (IPH), así como las entrevistas recabadas y los dictámenes periciales elaborados.
Por lo que se concluyó que se defendió legítimamente de un ataque a su familia.
Don Herminio narró a VANGUARDIA que el problema no era con la víctima (Jesús Enrique), pues aclaró que el conflicto lo inició Óscar Guevara Cervantes alías “El Güero Valero” junto a otros tres sujetos que se metieron a su casa.
Uno de los que allanaron su propiedad, Jesús Enrique González, cargó físicamente a una sobrina a la cual don Herminio ve como hija y se alarmó al ver cómo el hombre la estrujaba.
Acto seguido, don Herminio se metió a la cocina por un rifle para disparar contra los cuatro agresores y disparó en una sola ocasión su rifle para defenderse, lesionando en el estómago al hombre.
Luego de la agresión don Herminio aseguró que él mismo se entregó ante las autoridades y en ningún momento huyó, pues esperó a que llegara la ambulancia para que se llevaran a Enrique a un hospital, pero en el trayecto a los consultorios médicos de San Antonio de las Alazanas, murió.
“Yo tenía miedo que el Güero lesionara a mi hija y veo que otro muchacho la golpeaba y la estrujaba la quiso sacar y llevársela”, dijo don Herminio al momento que salió del penal.
Tras analizarse la información por la juez María Antonieta Leal Cota, esta confirmó la libertad de don Herminio.
