Saltillo: fallece Felipe Rodríguez Maldonado, editor emérito de Vanguardia

Felipe Rodríguez Maldonado, periodista reconocido por su pasión y ética, pero sobre todo por su calidad humana, falleció esta mañana a los 58 años, dejando como legado la reivindicación del oficio con sus mejores prácticas.

“Para ejercer el periodismo, ante todo, hay que ser un buen ser humano”. Ryszard Kapuscinski no tuvo la suerte de conocer a Felipe, pero pareciera.

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En el año 2000, cuando se imprimió la primera edición de “Los cínicos no sirven para este oficio”, que compila los criterios de Kapuscinski para hacer buen periodismo, Felipe comenzó a hablarle de tú a Saltillo a través de la portada de Vanguardia.

En más de dos décadas como editor en jefe, dio fe de que la “empatía”, esa cualidad de las personas para intentar comprender a los demás, es imprescindible para practicar el periodismo que busca impactar en la calidad de vida. Y para eso hay que prepararse. “Todavía no acabo de aprender a escribir. Mi reto es que la información siempre sea clara y esté bien escrita”, decía Felipe todavía a principios de 2020.

Alumno de Javier Villarreal y Armando Fuentes Aguirre “Catón”, en la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UAdeC, aprendió de ellos que “un comunicólogo debe entender y tener la posibilidad de hablar de diferentes temas sin decir barbaridades”.

Y antes, desde casa, con su padre, a “trabajar derecho, sin buscar atajos falsos, sin hacer trampas. A entregar cosas honestas”.

“UN EDITOR LEGENDARIO”

César Gaytán, periodista de Vanguardia, recuerda a Felipe como “un editor legendario”, pues leía las piezas completas y no había punto y coma mal puesto que se le escapara. Para muchos que coincidimos con él en Vanguardia, Felipe fue nuestro primer amigo cuando llegamos a la redacción por su nobleza y cualidad de hacerte sentir en casa. Y nuestro primer maestro, pues ante cualquier duda siempre estaba la opción de recurrir a él.

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“La verdadera escuela de periodismo es Vanguardia... y Felipe su mejor maestro”, señala Apolonio Alvarado, editor en jefe de la sección Mi Ciudad, con más de 45 años colaborando en esta casa editorial.

“SU VERDADERA PASIÓN ERA LA FAMILIA”

En su columna del martes 5 de abril de 2022, el periodista Enrique Abasolo, alumno, amigo y colega de Felipe escribió: “La verdadera pasión en la vida de Felipe, por encima de las letras, del periodismo, de la ciencia ficción o de cualquier otra vocación que se me escape, estaba su familia. Siempre decorando su entorno, la infaltable fotografía de su amada Socorro con su hermosa prole ablandaba hasta al más cínico (yo, por ejemplo)”.

Su esposa, Socorro Flores, y sus hijos Felipe, Fernanda, Jimena y Mariela comparten a Felipe con un séquito de periodistas que lo consideran parte de su familia. Para ellos, el más sentido pésame y un abrazo fuerte.

Nuestro amigo será velado hoy a partir de las 18:00 horas en las Capillas Renacimiento; y el día de mañana se realizará una misa de cuerpo presente a las 14:30 horas en la capilla del mismo sitio.

*Con información de Quetzali García.