Saltillo: jornada laboral de 48 horas semanales es nociva para los trabajadores, afirma especialista
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La doctora Yolanda Armendáriz, especialista en Salud Mental y Terapia Familiar, señaló que las jornadas laborales de 48 horas semanales provocan trastornos de ansiedad, estrés, depresión y frustración, que llevan al personal a consumir alcohol y otras sustancias.
“Las personas, cuando están sometidas a una condición de estrés aguda, van a ser resilientes y se van a recuperar de manera inmediata, sin embargo, cuando el estrés se cronifica va a provocar desajustes biológicos y una irregulación psico-biológica que conduce a problemas de salud mental”.
“El estrés está considerado como una relación particular entre el individuo y el entorno a su alrededor, condición que puede ser amenazante y cuando esto pasa viene una condición de peligro en ese bienestar de la persona; los estresores crónicos generan privaciones y desventajas que propician cambios y van a incidir en padecimientos físicos y en psicopatologías”.
La salud mental, indicó, ya es un derecho universal que debe otorgarse a las personas en el ambiente laboral. La ansiedad, el estrés grave, los trastornos de adaptación y de depresión se han incrementado a raíz de la pandemia.
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Los trabajadores enfrentan estrés psico-social por condiciones de pobreza y precariedad, no obstante, la jornada laboral semanal de 48 horas que se prolonga por más tiempo para buscar mayores ingresos y a esto se suman los tiempos de traslado hacia el trabajo y de salida, con personas que laboran 12, 24 y hasta 36 horas seguidas, dependiendo de la profesión y de la institución donde se labora.
En el ámbito familiar hay un impacto negativo en la calidad de vida, en la relación con la pareja y con los hijos, lo que repercute en la salud mental con estrés y frustración que aumentan el consumo de alcohol, drogas ilegales y el estrés postraumático, así como alteraciones con el sueño.
La afectación física y emocional impacta en el rendimiento laboral, aumenta riesgos de accidente en el trabajo y el personal puede tener problemas para adaptarse a nuevas tareas, lo que lleva a que el trabajador sufra acoso laboral, con exceso de carga laboral y, en consecuencia, con exceso de fatiga mental.
La rotación de turnos, explicó Armendáriz Vázquez, quien cuenta con estudios en Tanatología y Prevención del Suicidio, también afecta el estado psico-emocional de los trabajadores, pues no tienen tiempo para descansar, recuperarse y adaptarse a los cambios de turnos matutinos, vespertinos, nocturnos o mixtos.
“Todos estos aspectos van a desencadenar tensión y estrés laboral constante, continuo y de manera crónica en las personas, con efecto negativo en la salud de la persona y con un estado de malestar general, con riesgos de trabajo. Para la prevención, hay que hacer una reducción de las jornadas de trabajo y establecer políticas de prevención de riesgos, además de procurar condiciones de trabajo dignas y decentes”, concluyó.
