Saltillo: ¿Prefieres la Magdalena o la ‘Chilindrina’?, ¿o qué te parece un delicioso beso?

La llegada de la harina de trigo con los españoles tras la conquista de México, donde anteriormente solo se conocía el maíz, marcó el inicio de una serie amplia de innovaciones culinarias. Estas transformaciones dieron origen a la infinidad de panes mexicanos que en la actualidad son emblemas de unión familiar, amor, prosperidad, felicidad y mimos.

Cada región le da su toque distintivo a la variedad de panes, desde los garibaldis, las conchas, el pan de muerto, las semitas, el cochinito, los bigotes, las magdalenas, hasta la torta de queso. Además, las panadería saltillense se enriquece con creaciones como el ladrillo, el ojo de buey, la chilindrina, el beso, el pan de pulque, las campechanas, que parecían estar cayendo en el olvido, pero la realidad es diferente.

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La tendencia actual apunta a recuperar las antiguas técnicas de panificación de nuestros ancestros: amasar y hornear de forma más natural, utilizando masa madre en lugar de levaduras químicas. La masa madre consiste en harina y agua que fermentan para captar las levaduras del entorno; una vez activada, se convierte en la base de los panes, conocidos como panes con masa madre.

Algunos denominan “pan artesanal” a los productos elaborados mediante este método. Otra tendencia es la panadería “sin gluten”, ideal para aquellos con problemas de salud que les impiden disfrutar de los panes tradicionales. Se utilizan harinas de almendra, avena y arroz en lugar de gluten.

Entonces, ¿cuál es el pan más popular en México? Nada más y nada menos que el bolillo, único e inigualable en nuestro País. Cabe destacar que los panes pueden ser dulces o salados, o incluso una combinación de ambos, como el bísquet.

El pan dulce forma parte fundamental de la dieta diaria de los mexicanos y no puede faltar en el desayuno, la merienda o entre comidas. Por lo general, se acompaña con café, té o leche, pero en las épocas frías, la tradición dicta disfrutarlo con chocolate caliente y el famoso atole en sabores como fresa, vainilla, coco y, ¡sorpresa!, hasta napolitano.

Entre los saltillenses, el pan favorito es la concha, un bizcocho esponjoso con una capa superior de azúcar, manteca y harina que crea un sabor armonioso. Su nombre se debe a su parecido con una concha marina y ha experimentado diversas transformaciones en los últimos años; hay quien la rellena con nata, chocolate, cajeta o crema. ¿No se les antoja?

En una encuesta llevada a cabo por VANGUARDIA a través de Facebook el pasado mes de abril, los saltillenses opinaron que el mejor pan de la ciudad se elabora en las panaderías Mora Pan, El Maná, La Casita del Pan, Pan Mena, Aluet Panadería, el Merendero Saltillo, sin faltar La Crema, El Radio y La Española.

EL PAN DE PULQUE, TRADICIÓN SALTILLENSE

Una tradición culinaria muy especial de Saltillo es el pan de pulque. Este pan es muy importante en la gastronomía de México y es una mezcla de la cultura tlaxcalteca y la española. En la ciudad existen varias panaderías que elaboran esta delicia, como La Reyna, Pan Mena, Mora Pan, entre otras.