¿Quién fue Rogelio ‘N’?, el multihomicida de Saltillo que murió en un penal de Veracruz
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El 1 de junio de 2019, cuatro integrantes de una familia fueron asesinados dentro de su vivienda en la colonia Latinoamericana
Rogelio Flores Cruz, identificado en el proceso como Rogelio “N”, fue condenado por el asesinato de cuatro integrantes de su familia en la colonia Latinoamericana de Saltillo en junio de 2019. De acuerdo con notas publicadas en VANGUARDIA, el hecho generó conmoción por la violencia ejercida dentro del núcleo familiar.
La reconstrucción del caso, a partir de expedientes judiciales y reportes periodísticos, permite conocer la identidad del responsable, la forma en que ocurrieron los hechos, las pruebas reunidas por la Fiscalía, el desarrollo del proceso penal y las interrogantes que permanecen abiertas tras ser encontrado sin vida en su celda del Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 5 en Villa Aldama, Veracruz, el pasado 30 de agosto de 2025. La familia busca esclarecer las circunstancias de su muerte mediante solicitudes de autopsia independiente y acceso a expedientes oficiales.
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¿QUIÉN ERA EL IMPUTADO?
Según el expediente, Rogelio “N” tenía antecedentes por robo y alteración del orden público desde 2014. Tenía problemas de drogadicción desde los 15 años y en 2016 fue internado en el Centro Estatal de Salud Mental (Cesame) por un cuadro psicótico asociado al consumo de sustancias.
Familiares y registros judiciales refieren detenciones previas en Ramos Arizpe y Saltillo. Durante el proceso mostró una postura desafiante y, en apariciones públicas, reiteró no sentirse arrepentido.
EL MULTIHOMICIDIO: FECHA, LUGAR Y VÍCTIMAS
El múltiple homicidio se registró entre las 13:00 y las 14:00 horas del sábado 1 de junio de 2019, al interior de una vivienda ubicada en la calle Montevideo de la colonia Latinoamericana, en Saltillo.
En el lugar fueron localizadas sin vida cuatro personas: José Antonio ¨N¨, de 71 años, abuelo; Hermelinda ¨N¨, de 70, abuela; María Aurelia ¨N¨, de 91, bisabuela; y Virginia ¨N¨, de 60, tía abuela.
Los peritajes practicados establecieron que la bisabuela fue estrangulada y posteriormente degollada, mientras que las otras víctimas presentaban múltiples lesiones ocasionadas con arma punzocortante, además de golpes en diferentes partes del cuerpo y el rostro.
HALLAZGO DE LOS CUERPOS
La madre de Rogelio, Verónica, encontró los cuerpos el lunes 3 de junio de 2019, a las 09:50 horas, tras no obtener respuesta durante el fin de semana.
Al entrar a la casa encontró la puerta sin llave, percibió un olor que describió como “como a muerto” y localizó a los cuatro familiares en distintas habitaciones: la bisabuela cubierta con una sábana, la tía abuela en el baño sobre un charco de sangre, el abuelo en el estudio y la abuela en el cuarto de lavado con sangre en la lavadora.
En la escena quedó un mensaje escrito con lápiz labial en un espejo: “Después les entrego los restos de Rogelio. Esto le pasa a todos los pedófilos. CJN. Atentamente ZZZ25”. Verónica reconoció la letra de su hijo y su reciente uso del término “pedófilo/s”.
INVESTIGACIÓN QUE CONDUJERON A LA APREHENSIÓN
Dentro de la investigación, la Fiscalía incorporó como pruebas clave un video del crimen encontrado en un teléfono celular que, de acuerdo con el expediente, se le cayó a Rogelio Flores Cruz durante un forcejeo con su amigo José Alberto, conocido como “El Sefo”, la tarde del domingo 2 de junio; este último entregó el dispositivo a las autoridades.
También se aseguraron prendas ensangrentadas localizadas en la vivienda, entre ellas un pantalón de la marca Calvin Klein y unos tenis atribuidos al señalado.
A ello se sumaron testimonios que lo ubicaban llegando en taxi junto a un hombre no identificado y, más tarde, saliendo del lugar acompañado de otra persona mientras cargaban aparatos electrónicos que subieron a la camioneta de su abuelo, la cual desapareció de la calle horas después.
La Fiscalía precisó que al menos otra persona participó en los hechos, por lo que dejó abierta la línea de investigación en torno a posibles coautores.
DETENCIÓN, PROCESO Y CONDENA
Rogelio fue detenido en Nuevo Laredo, Tamaulipas, el 14 de junio de 2019, doce días después del ataque. En audiencias celebradas en junio de 2019 se le imputaron delitos que incluyen parricidio, matricidio, feminicidio, homicidio calificado y robo en cuantía mayor con violencia.
El 20 de junio de 2019 fue vinculado a proceso; la Fiscalía presentó como pruebas el video, las prendas ensangrentadas y testimonios.
Aproximadamente un año después de los hechos —alrededor de junio de 2020— se dictó una sentencia de 45 años de prisión con reparación del daño.
En la cobertura del proceso, Rogelio declaró: “No estoy arrepentido de nada de lo que hice... porque yo sé que me robaron de niño, no eran mi familia y eran pederastas”, atribuyendo a esa supuesta venganza la motivación del ataque.
PERFIL, VERSIONES SOBRE LA MOTIVACIÓN Y ANTECEDENTES CLÍNICOS
En el expediente y declaraciones públicas aparecen varias líneas explicativas: la versión de Rogelio (venganza por supuestos abusos), la hipótesis de robo para adquirir drogas y la posibilidad de disputa por herencia.
Expertos citados en reportes del caso describieron rasgos que algunos calificaron como propios de un psicópata o sociópata —falta de culpa, ausencia de arrepentimiento y capacidad de actuación— mientras otros especialistas cuestionaron que el perfil encajara con el de una víctima de abuso sexual.
En 2014 ya se había registrado un primer ingreso a una institución de salud mental, derivado de episodios de agresividad y consumo de sustancias, lo que dejó constancia temprana de alteraciones en su conducta. El registro señala además que en 2016 Rogelio fue internado en el Cesame por un cuadro psicótico ligado al consumo de sustancias.
TRASLADO AL CEFERESO 5 Y MUERTE EN CUSTODIA
Rogelio fue trasladado en 2020 al Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 5, en Villa Aldama, Veracruz. Fue encontrado sin vida en su celda el 30 de agosto de 2025; la noticia se reportó el 31 de agosto de 2025.
La necropsia preliminar consignó asfixia y la autoridad penitenciaria clasificó la muerte como no criminal (suicidio), señalando que habría usado una prenda de vestir para atentar contra su vida.
Su defensa, a cargo del abogado Rodolfo Richards, y la familia han cuestionado versiones contradictorias sobre el lugar exacto del deceso (si falleció en el lugar o durante el traslado) y solicitaron una autopsia independiente, expedientes médicos y disciplinarios, bitácoras de guardia y los nombres de compañeros de celda. La madre presentó además una denuncia ante la Fiscalía de Veracruz.
El caso de Rogelio Flores Cruz cierra por ahora una etapa judicial pero mantiene pendientes que la familia y la defensa han pedido esclarecer: la realización y resultados de una autopsia independiente, la entrega del expediente médico y disciplinario, las bitácoras de guardia y la comprobación de la secuencia exacta del fallecimiento (si ocurrió en el lugar o durante el traslado).
La denuncia presentada por la madre ante la Fiscalía de Veracruz y las solicitudes formales del abogado defensor subrayan la demanda de transparencia sobre una muerte ocurrida bajo custodia estatal.
Corresponde ahora a las autoridades penitenciarias y ministeriales aportar respuestas y documentación que permitan resolver las dudas sobre las circunstancias del deceso y cerrar, con pruebas y claridad, los cabos sueltos de un caso que conmocionó a la colonia Latinoamericana y a Saltillo.
