¡Sin pudor! Captan a jovencitas ‘vapeando’ en el transporte público de Saltillo
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A la vista de todos y sin preocupación alguna por las leyes vigentes, dos jovencitas fueron vistas utilizando cigarrillos electrónicos dentro de una unidad de transporte público de Saltillo.
El momento, captado por un usuario, tuvo lugar el pasado 7 de julio en el camión rotulado con el número 144, aproximadamente a las 11:00 de la mañana.
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De acuerdo con el relato, las muchachas abordaron el camión en la calle Carlos Salazar y descendieron minutos después en la calle Xicoténcatl, en el centro.
Durante el trayecto, y ante la mirada de los demás pasajeros, se dispusieron a “vapear” sin disimulo, salían las bocanadas y lo más increíble es que el resto de usuarios no tuvo alguna reacción evidente.
Es sabido que el e-cigarette, vaporizador, vapeador o simplemente “vape“ es un sistema electrónico diseñado para simular el uso del cigarro tradicional, pero la diferencia es que éste no contiene tabaco para quemar, sino que le agregan un líquido que se calienta y produce vapor, éste puede ser de distintos sabores.
Las autoridades de Salud han insistido en los múltiples problemas de salud que pueden acarrear el consumo de estos productos, tales como daño pulmonar, adicción a la nicotina, problemas cardiovasculares y efectos en el desarrollo cerebral, especialmente en adolescentes.
LA LEY ES CLARA, LA APLICACIÓN NO
A pesar de que en México la producción, distribución y venta de vapeadores y cigarros electrónicos están prohibidas por ley, el consumo aún no está expresamente sancionado, lo que crea un vacío legal que muchos aprovechan.
La legislación federal en México prohíbe desde enero de 2025 la producción, distribución, venta e importación de vapeadores y cigarros electrónicos, tras la publicación de un decreto presidencial. Esta medida se elevó incluso a rango constitucional mediante reformas a los artículos 4 y 5 de la Carta Magna, con el argumento de proteger el derecho a la salud.
Sin embargo, el panorama legal no es tan claro a nivel estatal. A las legislaturas locales se les dio un plazo de hasta 365 días para armonizar sus leyes con la reforma federal, por lo que la aplicación puede variar según la entidad.
Al respecto, diversas voces señalan que la prohibición podría estar impulsando un mercado negro con productos no regulados, potencialmente más peligrosos.
En Coahuila, hace unos meses se desató una controversia, pues surgieron versiones de que se estaba bloqueando la entrada de la nueva ley, por intereses económicos.
Por otra parte, expertos advierten de los vacíos legales y la facilidad para obtener amparos judiciales dificultan una aplicación efectiva de la ley, como se sabe, ha ocurrido en este estado y varios negocios de ese giro se anuncian en internet.
NO HAY QUIEN HAGA ALGO
Así que, mientras se están afinan los mecanismos de implementación y vigilancia, en la práctica estos productos siguen circulando y, como en este caso, usándose en espacios públicos sin mayor consecuencia.
Lo ocurrido en la ruta 5B de Saltillo es una muestra de que, mientras la ley avanza en el papel, la realidad social y el cumplimiento de la norma aún enfrentan serios desafíos. Para muchos usuarios, la línea entre lo legal y lo permitido sigue siendo difusa.
Por ahora, consumir vapeadores en lugares públicos no representa una falta directamente sancionada, pero sí genera preocupación por el mensaje que se transmite y la posibilidad de normalizar una práctica que se ha difundido, puede ser muy perjudicial para la salud de los consumidores.