Sin protección contra el COVID-19, 45% de pacientes crónicos: especialista saltillense
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En comparación con los individuos sanos, las personas inmunodeprimidas muestran una respuesta menos efectiva a las vacunas anti-COVID, incluso después de recibir dosis de refuerzo. Hasta el 45 por ciento de estas personas continúan sin estar protegidas contra el virus.
El doctor David Saucedo Delgado, especialista en Neumología, ha señalado que diversas investigaciones indican que las vacunas no presentan una gran efectividad en aquellos que sufren de condiciones médicas como diabetes, cáncer o si han recibido trasplantes.
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Esta falta de efectividad se acentúa en aquellos que consumen medicamentos para tratar sus enfermedades, especialmente si no siguen adecuadamente el tratamiento prescrito y no mantienen una dieta indicada.
Las personas inmunodeprimidas, al tener un sistema inmunológico debilitado, muestran niveles de anticuerpos considerablemente más bajos después de recibir las dos dosis, con una disminución de hasta un 20 por ciento.
Además, se observa una menor actividad de neutralización de los anticuerpos en un rango del 32 al 64 por ciento entre aquellos que han sido vacunados. En términos de durabilidad, la efectividad de los anticuerpos disminuye un 64 por ciento con el tiempo.
En algunos pacientes, la protección proporcionada por las vacunas solo se mantiene durante aproximadamente tres meses. En resumen, el 45 por ciento de las personas inmunodeprimidas no logran adquirir inmunidad contra el virus, según lo informado en diversos foros y conferencias especializadas.
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Estos pacientes, al tener un sistema inmunitario comprometido, experimentan una generación más lenta y menos efectiva de anticuerpos, lo que hace que la inoculación sea poco eficiente o nula. Esto los vuelve más vulnerables a enfermedades infecciosas en general.
Además, se destaca que las investigaciones para el desarrollo de vacunas se centran en personas sanas y no en aquellas con enfermedades subyacentes, lo que podría explicar la baja efectividad en individuos enfermos.
El especialista recomienda a aquellos con enfermedades crónico-degenerativas continuar utilizando cubrebocas en lugares cerrados con aglomeración de personas, emplear gel antibacterial, mantener la sana distancia, llevar un control médico y seguir una dieta nutritiva para fortalecer el organismo y reducir el riesgo de contraer el virus.
