En aseguramiento histórico, son decomisados 160 mil cigarros pirata en Coahuila
TORREÓN, COAH.- En una operación realizada por la Guardia Nacional, se confiscaron 160 mil cigarros de posible procedencia ilícita en el municipio de Torreón, como parte de la Estrategia Nacional de Seguridad Pública.
Esta intervención se llevó a cabo en una empresa de mensajería y paquetería, donde los binomios caninos de la institución detectaron la presencia de productos tabacaleros no regulados.
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La Guardia Nacional, con el apoyo de dos ejemplares caninos, ingresó a la empresa tras recibir autorización. Durante el rastreo preventivo de paquetes listos para ser enviados, los perros mostraron interés por seis cajas de cartón que, a simple vista, contenían abarrotes. Sin embargo, una de ellas presentó un orificio por el cual se pudo observar la presencia de cajetillas de cigarrillos.
Al abrir las cajas, los agentes encontraron un total de 8 mil cajetillas de cigarrillos, todas ellas sin la documentación que acreditara su legal procedencia. Dado que estos productos no cumplían con las normativas de salud y calidad, fueron asegurados y entregados a la agencia del Ministerio Público local para continuar con las investigaciones pertinentes.
UN RIESGO PARA LA SALUD
Los cigarros apócrifos o piratas, son elaborados de forma ilegal y suelen contener tabaco de calidad inferior mezclado con aditivos nocivos. La falta de control en su producción no solo ignora las regulaciones sanitarias, sino que también expone a los consumidores a un riesgo elevado de enfermedades graves, incluyendo bronquitis crónica, enfisema y diversos tipos de cáncer.
La accesibilidad de estos productos, a menudo más económicos que los cigarrillos regulados, se ha convertido en una preocupación creciente, especialmente entre los jóvenes. Este fenómeno no solo facilita la iniciación en el consumo de tabaco, sino que también contribuye a una mayor tasa de adicción en un grupo demográfico vulnerable.
IMPLICACIONES ECONÓMICAS
Desde una perspectiva económica, el comercio de cigarros apócrifos no solo evade impuestos, sino que también impacta negativamente a la industria tabacalera regulada.
El estado pierde ingresos que podrían ser utilizados en servicios públicos y programas de salud, mientras que los productores que cumplen con las normativas enfrentan una competencia desleal.
