Va EU contra los hermanos Treviño Morales, vinculados a masacres y crímenes en Coahuila

Tras casi 10 años de la captura de los hermanos Treviño Morales, quienes lideraban al cártel de Los Zetas en la frontera de México, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, informó que Estados Unidos acusó a ambos capos que operaron en Coahuila de masacres, torturas, secuestros y trasiego de drogas.

El pasado miércoles, Salazar realizó una publicación sobre la acusación formal del gobierno de Estados Unidos en contra de Omar Treviño Morales “Z-42” y Miguel Ángel Treviño Morales “Z-40”, en donde se les señala de múltiples masacres, torturas y secuestros, que se han realizado para proteger las actividades del trasiego de drogas.

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Aunque sus nombres volvieron a colocarse en el foco público, e incluso, la presidenta Claudia Sheinbaum ya ha emitido una respuesta al gobierno vecino, en Coahuila, los nombres de estos hermanos han sido colocados en denuncias y señalamientos locales a espera de ser resueltos por múltiples crímenes en Coahuila desde por lo menos 2009.

De acuerdo con dichos ante la Corte de Texas por parte de testigos protegidos, quienes han aportado información a investigaciones por diversos casos de trasiego de drogas, los hermanos Treviño Morales dirigieron a Los Zetas en Coahuila entre 2008 y 2013.

Uno de los sucesos más sonados fue la fuga de 131 internos del Penal de Piedras Negras en septiembre de 2012, misma que habría sido encabezada por los Treviño Morales.

Sin embargo, el Centro de Reinserción de Piedras Negras ya tenía un largo historial por ser la sede de sucesos en los que también mencionaban los nombres de estos hermanos, quienes se dice, ordenaban el asesinato y desintegración en ácido de sus contrincantes y disidentes al interior de este penal, a plena luz del día.

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El caso donde más se resalta el nombre de los Treviño Morales, originarios de Nuevo Laredo, Tamaulipas, en su paso por Coahuila, es “La Masacre de Allende”, donde se ha hablado de la desaparición de hasta 300 habitantes de ese pueblo, que está a unos 50 kilómetros de la frontera con Eagle Pass.

Este suceso, según los testimonios, fue encabezado por los hermanos debido a un ajuste de cuentas en marzo del 2011, cuando ambos ordenaron tomar el “rancho Los Garza”, para realizar crímenes, quemar cuerpos de niños, niñas, hombres y mujeres, además de personas de la tercera edad.

Sin embargo, colectivos de defensa de derechos humanos han resaltado que este suceso no fue más que la cúspide de una serie de eventos que se habían registrado a lo largo de varios años en toda la franja fronteriza de Coahuila que además podían observarse en prolongados enfrentamientos armados, además de los otros crímenes mencionados, entre ellos, la desaparición.

Según los registros de la Secretaría de Gobernación, el 87 por ciento de las personas que han sido reportadas como desaparecidas y no localizadas en Coahuila, se esfumaron durante el tiempo que estuvieron asentados en el territorio los hermanos Treviño Morales.

En una ocasión, la Fiscalía General de Coahuila dijo en una entrevista para VANGUARDIA que en un interrogatorio realizado a Omar Treviño al interior del penal del Altiplano, emitió una frase que generó una revelación sobre la búsqueda de personas desaparecidas: “busquen en las presas”. Sin embargo, a pesar de diversos operativos, la autoridad no logró resultados positivos.

En la presentación de la acusación, Ken Salazar reconoció que estos hermanos habían fundado, además del Cártel de los Zetas que operaba en Coahuila, también el Cártel del Noreste, cuyas siglas han sido denunciadas por las autoridades de Coahuila como las que se han signado en los enfrentamientos armados de los últimos años. Pero el embajador también agregó en la carta de la acusación: “a pesar de estar en prisión, han seguido en control del Cártel del Noreste”.