Cartel español y mexicano en el aniversario 66 de Plaza México

CIUDAD DE MÉXICO.- La Monumental Plaza de Toros México cumplirá este domingo 66 años de vida y lo celebrará con un cartel en el que alternarán diestros españoles y mexicanos.

Este monumento histórico, que forma parte desde hace muchos años del panorama visual y que es además un atractivo turístico de esta capital, vive en estos momentos un auge en su actividad principal para la que fue creado: la fiesta de los toros.

A pesar que algunos sectores de la sociedad piden su demolición y otros que se termine la fiesta de los toros en la ciudad, el coso de Insurgentes sigue más vivo que nunca y más fuerte para consolidar su prestigio como la plaza más grande del mundo.

Así, presentará en este 66 aniversario una corrida con ocho toros en un cartel de postín, con un interesante 'mano a mano' juvenil entre dos diestros triunfadores de México y de España, que con seguridad llenará los tendidos.

Por México estarán los jóvenes valores José Mauricio y Diego Silveti, quienes tratarán de pelearle las palmas a los españoles Julián López 'El Juli' y a José María Manzanares, diestros ya consolidados en el mundo de los toros.

Se lidiarán en este festejo especial por el aniversario del coso monumental de Insurgentes, toros de la ganadería de Xajay, listos y reseñados ya desde el pasado jueves para ser lidiados mañana en punto de las 16:30 horas.

En estos 66 años la Plaza México se ha consolidado como un escenario plurifuncional en la capital del país, ya que no sólo presenta espectáculos taurinos, su principal función, sino de otros deportes, artísticos, culturales, religiosos y hasta políticos.

El coso fue inaugurado el 5 de febrero de 1946 con un cartel integrado por los diestros mexicanos Luis Castro 'El Soldado' y Luis Procuna, y por el legendario matador español Manuel Rodríguez 'Manolete', con toros de San Mateo.

En esa primera temporada de 1946 la nueva plaza de toros solo presentó al público cuatro corridas, en las que 'Manolete' fue la parte fundamental junto al 'Faraón de Texcoco', Silverio Pérez, quien se alzó como el primero en cortar un rabo.

Considerada como la más grande y cómoda del mundo, la Plaza México se construyó gracias al interés del empresario yucateco de origen libanés Neguib Simón, quien tuvo la visión de edificar una mega Ciudad de los Deportes en la capital.

Este ambicioso proyecto abarcaba la construcción de varios escenarios, como una alberca olímpica, pistas de boliche, canchas de basquetbol y voleibol, un estadio de futbol, una plaza de toros, y un complejo comercial con restaurantes y salas de cine.

Luego de algunos problemas económicos y de otra índole en este proyecto, sólo se pudo terminar el estadio de futbol, que hoy es sede del Club Deportivo Cruz Azul, y la Monumental Plaza de Toros México.

La construcción de la majestuosa obra fue dirigida por el ingeniero Modesto Rolland, quien la edificó en terrenos que ocupaba una ladrillera en la colonia Nochebuena, en ese entonces ubicada en las orillas de la ciudad de México.

Esta colosal obra monolítica de hormigón armado inició el 1 de diciembre de 1944, la cual tendría una peculiar característica, única en el mundo de la construcción de esa época, el que su ruedo estaría ubicado a 20 metros por debajo de las calles circunvecinas.

El impactante escenario, que tiene un aforo para más de 45 mil personas, fue adornado en sus fachadas por diferentes esculturas, todas de tipo taurino, obras del maestro valenciano Alfredo Just.

Durante estos 66 años de rica historia no sólo taurina del coso de Insurgentes, han desfilado por su ruedo las máximas figuras taurinas de todos los tiempos, tanto nacionales como internacionales.

La Plaza México se ha consolidado como uno de los tres escenarios más reconocidos a nivel mundial en el ámbito taurino, junto a la Monumental Plaza de Las Ventas en Madrid y a la Plaza de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla.