El exceso, verdugo de boxeadores

México, D.F.- El sol aún no levanta por completo y en un camellón a las afueras del metro Aragón, en la ciudad de México, las clases apenas comienzan. Rumbo al trabajo, automovilistas corren por los carriles de Circuito Interior pero a unos pasos de esta vía, un trabajador -en este caso, digamos, el patrón- va llegando a su centro laboral.

Faltan pocos minutos para las ocho de la mañana. Cuauhtémoc Gómez desciende de su auto y baja consigo costales, peras, guantes.  Fue boxeador profesional y se le conoció sobre el ring como "Famosito", peleador que se fue abriendo brecha poco a poco dejando en claro que tenía aptitudes y no era únicamente el hijo de Octavio "Famoso" Gómez, reconocido pugilista contemporáneo de Rubén "El Púas Olivares", tan contemporáneo que, además de unas peleas, hasta las francachelas compartieron, así como apariciones en diversas películas ochenteras.

Como parece ser ya una tradición entre las figuras del boxeo mexicano, Cuauhtémoc "Famosito" Gómez, a sus casi 40 años de edad, vive de sus glorias pasadas.

Dinero derrochado y fama, mucha o poca, consumida a toda velocidad.

La historia de cientos en el boxeo nacional... "Excesos, la fiesta, ¿y el gimnasio? `Ah, bien, gracias, mañana entreno'", dice esta estrella de los Guantes de Oro, torneo de box amateur que se escenifica en la Arena México desde hace décadas (y de donde también salió su padre). Cuauhtémoc viajó por diversas partes del mundo enfrentándose a peleadores de gran valía como Miguel "Mickey Mouse" Román, Danny Romero, Johnny Tapia, entre otros.

Fue campeón, ostentando el del peso gallo por la Federación Latinoamericana de Boxeo. Y en algún tiempo, Gómez se encontró en el sexto lugar de la clasificación del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y décimo en la de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).

Así hasta que la edad y "la vida ingobernable" de vicios y excesos, como él la nombra, lo llevaron al retiro. La Federación de Comisiones de Box de la República Mexicana (Fecombox) así lo indica en un acta: "Suspensión definitiva basada en su récord negativo en los últimos siete años, y su edad avanzada para continuar en esta actividad, todo lo que pone en riesgo inminente su integridad física".

Pero "Famosito" se puso de nuevo los guantes, ahora como profesor. En los límites de las delegaciones Gustavo A. Madero y Venustiano Carranza, en la Unidad San Juan de Aragón, al aire libre, de lunes a sábado, por las mañanas y por las tardes, enseña el deporte de los puños a niños, adolescentes, hombres "y hasta señoras".

Un armazón improvisado sostiene los dos costales. Una pera pende de un cable. Unas pesas. Algunos guantes. Unas cuerdas para brincar. Y ya. Es el gimnasio improvisado de "Famosito" Gómez. "Nos hace falta que peras, que guantes, un ring. Boxeamos aquí, en el suelo". Brinda su técnica a cerca de 30 alumnos, a los que les cobra una cantidad casi simbólica.

Cuauhtémoc "Famosito" Gómez nos invita a subir con él a su ring, a ésta, su nueva batalla. "Van a encontrar disciplina y una buena técnica de boxeo. Van a saberse defender".