Schumacher y otros retornos deportivos

El regreso de Michael Schumacher a las pistas con Mercedes GP marcará su retorno después de tres años de ausencia, por lo que la gran pregunta que se cierne sobre el alemán es si será capaz de dominar la Fórmula Uno como lo hizo en años anteriores.

Su legado no está en riesgo, pues sus siete campeonatos mundiales, 91 victorias de por vida, 154 podios, 68 pole positions y 76 vueltas más rápidas, lo convierten en uno de los máximos íconos del deporte de la velocidad.

Schumacher ya había intentado regresar a la Fórmula Uno en el 2009 con Ferrari, pues tras la lesión de Massa se abrió la oportunidad para el `Kaiser', quien no pudo volver por una lesión en el cuello. Unos meses después, anunció su retorno, pero ahora para pilotar una `flecha de plata' de Mercedes las próximas tres temporadas.

Cada victoria que obtenga aumentará el mito de `Schumi' en la F1, aunque también su imagen podría quedar dañada un poco si fracasa, pues se unirá a una lista de deportistas que, tras su retiro, decidieron darse una segunda oportunidad, algunos con mucha suerte, otras, con muy poca.

 

Martina Hingis y Kim Clijsters

El caso de Martina Hingis es un ejemplo de que volver no siempre es lo más adecuado, pues su prematuro retiro a los 22 años, debido a lesionas crónicas en los ligamentos de los pies, la dejó como una de las tenistas más importantes de la historia, con cinco torneos Grand Slam ganados y 209 semanas consecutivas como número uno del ranking WTA.

Sin embargo, en 2006, la jugadora eslovaca decidió volver a las canchas, y lo hizo de buena forma, incluso llegó al sexto lugar del ranking, sin embargo, una sospecha de dopaje por cocaína puso fin de nueva cuenta a su carrera. El 4 de enero del 2008 el test fue confirmado y Hingins fue suspendida dos años del tenis profesional.

El caso de Clijsters es lo opuesto, es un auténtico cuento de hadas, pues la belga regresó del retiro después de casarse y tener una hija para conquistar el US Open del 2009, al derrotar en la final a Caroline Wozniacki, mientras que en semifinales se deshizo de Serena Williams. Para el 2010, participará en los cuatro Grand Slam del año.

 

Michael Jordan

Michael Jordan es todo un ejemplo en cuanto a éxitos después del retiro se refiere, pues después de lograr el tricampeonato con los Bulls de Chicago, del 91 al 93, decidió poner fin a su carrera alegando que ya no disfrutaba igual el deporte, por lo que probó suerte en el beisbol, en donde no tuvo éxito.

Su regreso se dio en la temporada 1994-95, aunque en ese año no pudo conseguir el título, sin embargo, del 96 al 99 nuevamente guió a Chicago al tricampeonato en finales extraordinarias, las dos últimas, ante el Jazz de Utah de John Stockton y Karl Malone.

Después del título se volvió a retirar y regresó para jugar una última temporada en el 2002-03 con los Wizards de Washington, equipo al que guió a postemporada a pesar de su pobre plantilla. Los regresos de Jordan a la NBA sirvieron para alimentar aún más su historia en el basquetbol, en el que es toda una leyenda.

 

Lance Armstrong

Lance Armstrong es otro ejemplo de retornos prodigiosos, pues tras iniciar su carrera en 1993, en octubre del 96 se le detectó un cáncer testicular con metástasis pulmonares y cerebrales, por lo que después de una agresiva terapia de quimioterapias regresó a las pistas dos años después con el equipo US Postal y comenzó a escribir su leyenda.

Así, el ciclista estadounidense se convirtió en un inmortal del ciclismo al conquistar en siete ocasiones el Tour de Francia, del 99 al 2005, para retirarse como todo un campeón y con marcas casi imposibles de superar.

Sin embargo, en el 2009, a sus 37 años, decidió darse una nueva oportunidad en el ciclismo, y corrió el Tour de Francia en el equipo Astana, quedando en el tercer sitio, por debajo de Alberto Contador y Andy Schleck. "Nada mal para un viejito", como dijo el mismo texano. Armstrong aún continúa en activo y el próximo año correrá para el equipo RadioShack.

 

Joe Montana y Brett Favre

En el futbol americano, Joe Montana y Brett Favre son dos ejemplos de regresos destacados, pues el primero, tras guiar a San Francisco a cuatro de los cinco Super Bowls que ostenta, sufrió una lesión en el codo que lo dejó fuera de las temporadas 91 y 92, por lo que fue canjeado a los Jefes de Kansas City, a los que llevó a postemporada dos temporadas consecutivas, antes de anunciar su retiro en 1994.

Por su parte, Brett Favre, ganador de un Super Bowl con los Empacadores de Green Bay, anunció su retiro en el 2008, sin embargo, los Jets de Nueva York lo convencieron a jugar una última temporada, la cual aprovechó para imponer marcas.

Actualmente, después de anunciar un nuevo retiro, `El General' sigue en los emparrillados, aunque ahora enfundado en los colores de los Vikingos de Minnesota, con los que ha roto varios récords de mariscales de campo y se perfila para ser contendiente en playoffs..

 

Pelé y Maradona

Después de conquistar el Mundial de México 1970, Pelé se quedó sin nada más que ganar en el futbol, por lo que en el 72 anunció su retiro, primero de la selección brasileña con un juego que terminó 2-2 ante Yugoslavia, y luego con el Santos en 1974.

Sin embargo, debido a problemas económicos tuvo que reconsiderar su retiro y jugó en el Cosmos de Nueva York por tres temporadas, en las que marcó 64 anotaciones para dejar su récord de por vida en mil 282.

Maradona, por su parte, jugó el primer duelo del Mundial de Estados Unidos 1994 ante Nigeria, incluso logró un lindo gol, sin embargo, en el segundo, ante Nigeria, salió sorteado para el examen antidoping, del que salió positivo en cinco sustancias prohibidas, por lo que fue suspendido del futbol mundial por 15 meses.

Regresó en el 95 con Boca Juniors para jugar sus últimos partidos como profesional, marcado siempre por el estigma de los casos de dopaje. Maradona jugó su último juego ante River Plate, en la victoria xeneize por 2-1 el 30 de octubre de 1997, en ese partido fue sustituido por Riquelme.

 

Otros regresos

En el box el caso más extraordinario es el de George Foreman, quien se retiró a los 28 años en 1977, sin embargo, decidió volver en 1991 para recuperar su corona de pesos pesados y, tras caer por puntos ante Evander Holyfield y ante los Tommy Morrison, demostró en 1994, a sus 45 años, que todavía tenía una gran pelea en sus guantes y mandó a la lona a Michael Moorer para proclamarse campeón, sitio que ocupó hasta 1999.

Magic Johson, también regresó en 1995, a sus 36 años, para jugar una última temporada con los Lakers tras su anuncio de que era portador del VIH. Al final, llevó al equipo de Los Angeles a postemporada al promediar 14.6 puntos y 6.9 asistencias.

Mark Spits y Bjon Borg también estelarizaron retornos, pero ninguno tuvo suerte. Spitz no logró calificar a los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 y Borg no consiguió ganar un solo partido.