No todos los peloteros de Grandes Ligas apoyan la idea de aislarse en Arizona para jugar
La idea de Ligas Mayores de concentrar los 30 equipos en Arizona para llevar a cabo la temporada, no fue bien recibida por jugadores que no quieren dejar de ver a su familia
La idea propuesta por Grandes Ligas de traer a los 30 equipos a Arizona para jugar a puerta cerrada en estadios donde usualmente hacen los entrenamientos de primavera no fue tan bien recibida por la mayoría de los jugadores, muchos con el argumento de que no pueden estar tanto tiempo sin ver a su familia.
La idea, como se describe en varios informes, exigiría que los jugadores y el personal de cada equipo sean puestos en cuarentena lejos de sus familias, con la esperanza de mantener la liga dentro de burbuja libre de coronavirus. Los equipos irían de hoteles a autobuses y estadios, mientras se someten a pruebas regulares en un intento por prevenir la propagación de la enfermedad.
“Definitivamente creo que esta es solo una primera idea que se está dando a conocer”, dijo el receptor de los Diamondbacks, Stephen Vogt. “Obviamente, no soy fanático de la idea de estar lejos de mi familia durante cuatro meses”.
Las fuentes dijeron que Grandes Ligas y la asociación de jugadores están discutiendo una variedad de posibles soluciones, y la liga emitió ya un comunicado insistiendo en que aún no se había decidido por una opción específica o desarrollado un plan detallado para la temporada.
Eloy Jiménez está en Arizona desde que fueron cerrados los campamentos de pretemporada por la pandemia. Aunque se dijo listo para jugar, manifestó preocupación por algunos compañeros.
“Yo sólo quiero jugar. Si ellos deciden jugar aquí, lo voy a disfrutar, pero... si la temporada comienza con todos los juegos en Arizona, ello significará que los chicos se separarán de sus familias por un largo tiempo y jugarán en un calor de 43 grados centígrados”, dijo el jardinero de los Medias Blancas de Chicago, durante una teleconferencia organizada por el club. “¿Qué tan difícil será eso? Va a ser duro”.
Un jugador se preguntó si podría ver su contrato anulado en caso de que se negara a aceptar la idea. Otro dijo que no sería capaz de dejar a su esposa en casa después de que recientemente le dieron la bienvenida a un nuevo bebé.
Aunque no todos se opusieron.
“Tiene mérito la idea, solo se necesita mucha más logística”, escribió un jugador en un mensaje de texto. “Pero si eso es lo que se necesita, entonces estoy dentro. Dudo que sea (lejos de las familias) durante cuatro meses, quizá sean seis semanas”.
En un informe, el sitio web The Athletic citó fuentes que dijeron que a las familias “se les podría permitir” quedarse con los jugadores, aunque eso complicaría aún más la capacidad del deporte para mantener a sus jugadores aislados y sanos.
El jardinero izquierdo de los Diamondbacks, David Peralta, dijo que se estaba volviendo loco sin el beisbol y asume que la mayoría de los otros jugadores sintieron lo mismo, pero tampoco pensó que esta idea fuera la correcta.
“Solo tenemos que esperar un poco y seguir orando para que la situación se calme, seguir las reglas y con suerte el virus desaparecerá y podremos comenzar a jugar lo antes posible”, dijo Peralta. “Esa sólo una idea, vamos a ver que saldrán un montón de ideas y veremos cuál hace ‘clic’. Veremos qué va a pasar”.
Vogt dijo: “Creo que todos queremos jugar y queremos jugar tantos juegos como sea posible, pero también queremos hacer lo mejor para nosotros y nuestras familias. Estamos bendecidos de que tenemos la capacidad de jugar este juego para vivir, pero ¿a qué costo lo queremos hacer?