Los Ravens vuelan alto: ¡Los Bills se hunden en Baltimore!
COMPARTIR
Derrick Henry brilló con un espectacular touchdown de 87 yardas, estableciendo un nuevo récord para la franquicia; Lamar Jackson tuvo una destacada actuación
En una emocionante noche de futbol americano, los Ravens de Baltimore terminaron con el invicto de los Bills de Buffalo al vencerlos de manera aplastante 35-10 en el M&T Bank Stadium. Este encuentro no solo marcó el final de la racha perfecta de los Bills, sino que también subrayó la impresionante actuación de los Ravens, liderados por su mariscal de campo, Lamar Jackson, y el corredor estrella, Derrick Henry.
Desde el comienzo del juego, los Ravens demostraron su dominio. Derrick Henry, el corredor de cuatro veces Pro Bowl, abrió el marcador con una escapada espectacular de 87 yardas en su primer acarreo, estableciendo un nuevo récord para el touchdown por tierra más largo en la historia de la franquicia de los Ravens. La explosividad de Henry fue evidente, ya que logró el primer touchdown del partido, lo que dejó a la afición local extasiada.
A pesar de la rápida ventaja de Baltimore, los Bills no se quedaron de brazos cruzados. Respondieron con un gol de campo de 50 yardas convertido por Tyler Bass, recortando la diferencia en el primer cuarto. Sin embargo, Baltimore volvió a tomar el control del juego cuando Henry, nuevamente, se hizo presente en el marcador, esta vez atrapando un pase de touchdown de Jackson. La combinación entre el mariscal de campo y el corredor fue letal, aumentando la ventaja a 14-3.
TE PUEDE INTERESAR: Renata Zarazúa conquista el ITF W75 de Templeton y alcanza el top 70 de la WTA
En el segundo cuarto, la conexión entre Jackson y su corredor siguió dando frutos. El mariscal, quien ha sido galardonado con el premio MVP de la NFL en dos ocasiones, lanzó su segundo pase de anotación del partido, esta vez a Justice Hill, ampliando la ventaja a 21-3 antes del medio tiempo. La defensa de los Ravens había logrado contener a la ofensiva de los Bills, mientras que su ataque se mostraba cada vez más efectivo y equilibrado.
Al regresar del descanso, los Bills intentaron recortar distancias con un esfuerzo renovado. El mariscal de campo, Josh Allen, mostró su capacidad para improvisar, extendiendo una jugada que culminó en un impresionante pase de 52 yardas a Khalil Shakir, llevándolos a la zona roja. Ty Johnson finalmente logró llevar el balón a la zona de anotación con una carrera de tres yardas, poniendo el marcador 21-10 y generando esperanzas en la afición visitante.
Sin embargo, la defensiva de los Ravens no estaba dispuesta a permitir que los Bills recuperaran el control. Después de forzar un fumble en la siguiente posesión de Buffalo, Lamar Jackson tomó las riendas y lideró a su equipo en una ofensiva decisiva. Con su habilidad para leer las jugadas y ejecutar carreras clave, Jackson llevó el balón hasta las diagonales, aumentando la ventaja a 28-10. Su actuación fue fundamental, completando 13 de 18 pases para 156 yardas y lanzando dos pases de anotación, además de aportar 54 yardas y un touchdown en acarreos.
Ya en el último cuarto, la ofensiva de Baltimore continuó mostrando su poder. Con Derrick Henry impulsando el juego terrestre, los Ravens ejecutaron una serie de jugadas que culminaron en un último touchdown, sentenciando la victoria con un 35-10 que dejó a los Bills sin respuestas. La combinación del juego terrestre de Henry y el talento explosivo de Jackson resultó imparable para una defensa que había estado invicta hasta esa noche.
La victoria de los Ravens no solo significa un triunfo significativo en la temporada, sino que también refleja la capacidad del equipo para competir al más alto nivel. Con un récord impresionante y una actuación destacada de sus estrellas, Baltimore se posiciona como un contendiente serio en la conferencia.
A medida que la temporada avanza, los Ravens demostrarán que son un equipo a tener en cuenta, mientras que los Bills tendrán que ajustar su estrategia para recuperarse de esta derrota inesperada. La próxima semana se avecinan nuevos desafíos y oportunidades para ambos equipos en su búsqueda por la gloria en la NFL.