Despedida con toque azteca del Vicente Calderón

El estadio Vicente Calderón cerró este domingo sus puertas al futbol entre la nostalgia, la clase y los goles de su último partido, un recorrido por las leyendas del Atlético de Madrid, por los futbolistas que transformaron un campo en mucho más, en miles de emociones, pasiones y recuerdos.

En un recinto que quedará siempre para la historia del Atlético de Madrid y del futbol. Del primer partido, el 1-1 del Valencia aquel 2 de octubre de 1966, hasta ayer, hasta el homenaje final, al que acudieron 150 futbolistas y más de 51 mil espectadores. El resultado, 4-5 para las leyendas mundiales.

Fue la última sesión de futbol del Calderón, los últimos 90 minutos para despedir más de medio siglo, 1.227 partidos oficiales, miles de emociones, grandes noches, gestas, decepciones e infinidad de memorias, de la grada y de cada uno de los futbolistas que participaron en el duelo, bien sobre el césped o en la grada.

En el duelo, que sirvió para hacer un llamado a  la paz, Cuauhtémoc Blanco fue uno de los invitados de lujo junto a jugadores de la envergadura de “Zico”, Ronaldinho, Seedorf y Dudeck.

También hubo muchas leyendas en el palco, de aquellos magníficos equipos que entre los 60 y los 70 conquistaron cuatro Ligas, cinco Copas de España, la Recopa de Europa y la Copa Intercontinental y del que estrenó el Manzanares el 2 de octubre de 1966.

Enrique Collar, Adelardo, Ufarte, Ayala, Leal, Capón, Salcedo, Alberto, Eusebio, Irureta, Pacheco, Rodri, Rivilla, Calleja, Mendonça... Y más de generaciones posteriores, Baltazar, Manolo, Landaburu, Quique, Marina, Julio Prieto, que tampoco se vistieron de corto.

Y muchas leyendas en el terreno de juego. En el Atlético, que saltó al campo con una mezcla de futbolistas actuales —Gabi, Fernando Torres y Adrián López, ahora en el Villarreal—, de campeones de la Liga Europa y la Supercopa de 2010 —Antonio López, Diego Forlán y Luis Perea— y del “doblete” de 1996 —Santi Denia, Milinko Pantic y Juan Vizcaíno—, además de Leo Franco y Contra.

Durante el partido llamó la atención el dorsal de la playera del ex jugador americanista portando su típico número 10 debajo de un nombre mal escrito. 

“Cauhtémoc”, era el estampado que predominaba en la camiseta del ahora alcalde de Cuernavaca.

El nombre mal escrito no fue impedimento para que el tres veces mundialista diera una asistencia de gol, y anotara un tanto a pase del astro brasileño Ronaldinho.