La noche que Tom Brady difícilmente olvidará

El escenario estaba puesto para que los actuales campeones, los Buccaneers de Tampa Bay, de la mano de su quarterback Tom Brady, aseguraran el título divisional frente a los Saints. Sin embargo, la leyenda en activo de la NFL vivió una noche de pesadilla que difícilmente olvidará.

El laureado multicampeón de la NFL se ha acostumbrado a tener los reflectores encima con bastante frecuencia, y con justa razón, pues a lo largo de su carrera ha forjado descomunales cifras, así que las marcas personales también llegan con frecuencia.

Brady y los Bucs tenían el escenario perfecto para otra noche mágica, sin embargo, con el paso de las jugadas poco a poco se fue gestando una verdadera pesadilla para el QB y su equipo.

Las lesiones de Chris Godwin, Mike Evans y Leonard Fournette, pilares a la ofensiva que comanda Tom, se sumaron a las cuatro capturas, un balón suelto y una intercepción conseguidas por la defensiva de los Saints sobre Brady.

Si las blanqueadas son de escándalo en el deporte de las tackleadas, lo son más cuando el protagonista es Tom Brady, pues la primera vez que le ocurrió fue en Diciembre de 2006, con los Patriots de Nueva Inglaterra... hoy, 15 años después, vuelve a vivir ese trago amargo, esta vez con los Buccaneers, equipo al que llevó al título del Super Bowl LV la campaña anterior.

Pasaron 255 partidos desde aquella blanqueada en la Semana 15 de la Temporada de 2006, de igual forma fue un Domingo por la Noche, correspondiente al 10 de diciembre frente a los Dolphins, con quienes cayeron 21-0.

Aquella noche, Brady Tenía 29 años y 129 días, incluso en esas fechas, con los Saints, Drew Bress jugaba sus primeras campañas en Nueva Orleáns; esta vez, con 43 años de edad, sufrió su segunda derrota sin marcar un solo punto y fue en un duelo en el que ningún elemento defensivo de los que lo hicieron sufrir siquiera habían ingresado al profesionalismo en aquel lejano 2006.

Cierto, fue una semana atípica en la liga, incluso en los equipos de Football Fantasy se observan los estragos especialmente para aquellos que no dudaron en colocar a Tom Brady como titular, pues el QB de Tampa Bay apenas sumó 4.76 unidades; mientras quienes buscaron una ‘mejor opción defensiva’ al ver a los Saints ante el poseedor de 7 anillos de Super Bowl, seguramente lamentan haber dejado escapar los 18 puntos sumados por la defensiva de Nueva Orleáns.

La frustración no sólo es para ellos, o para los seguidores de los Buccaneers, sino para los mismos jugadores, especialmente para Tom Brady, quien, con su segunda blanqueada en la NFL, vivió una noche que difícilmente olvidará.

Esta también fue una noche histórica en la NFL, pues acabó una racha de 255 partidos con Tom Brady poniendo puntos en el marcador.